El objeto medía 2,5 metros de diámetro y pesaba media tonelada.
Un enorme fragmento de basura espacial con forma de anillo cayó esta semana en una aldea de Kenia, informó The New York Times.
El medio detalla que se trata de una estructura circular de metal de más de 2,5 metros de diámetro y 500 kilos de peso que cayó en la remota localidad de Mukuku. El impacto no dejó víctimas ni daños, pero asustó a los residentes, que pensaron que había explotado una bomba.
Por su parte, la Agencia Espacial del país africano confirmó que se trata de restos espaciales e identificó el objeto como un anillo de separación de un cohete de lanzamiento. El organismo señaló que estaba investigando el origen y la propiedad de la basura caída. «Este tipo de objetos suelen estar diseñados para quemarse al reentrar en la atmósfera terrestre o para caer sobre zonas deshabitadas o en los océanos», explicaron desde la Agencia espacial, que describió el incidente como «un caso aislado».
Pese a que la institución asegura que el anillo, que ha sido retirado, no suponía ninguna amenaza, los aldeanos siguen indignados por la caída del resto espacial. «Queremos que se indemnice al propietario de este terreno», declaró uno de los locales. «Desde que cayó este objeto, no hemos podido dormir. Todo el mundo se pregunta qué está pasando», agregó.
El espacio está lleno de la basura procedente de lanzamientos de vehículos espaciales o de satélites. Según una estadística de la Agencia Espacial Europea de septiembre del año pasado, la masa total de todos los objetos espaciales en la órbita terrestre suma más de 13.000 toneladas, de las que, aproximadamente, un tercio es basura, destaca Sara Webb, astrofísica de la Swinburne University of Technology de Melbourne.