El primer ministro israelí advirtió que los insurgentes yemeníes «aprenderán por las malas que quien ataque Israel pagará un precio muy alto».
El primer ministro israelí, Benjamín Netanyahu, afirmó que su país está protegiendo al mundo de los hutíes con los ataques constantes que realizan las Fuerzas de Defensa de Israel (FDI) en territorio yemení.
«No solo nos están atacando a nosotros, están atacando el mundo entero. Están atacando el transporte marítimo internacional y las rutas comerciales», se le escucha decir en un video. En este sentido, explicó que cuando Israel «actúa en contra de los hutíes, actúa en nombre de toda la comunidad internacional», añadiendo que países como Estados Unidos y «muchos otros lo entienden bien».
Asimismo, el primer ministro advirtió que los hutíes «están aprendiendo y aprenderán por las malas que quien ataque Israel pagará un precio muy alto».
La madrugada del jueves, las FDI comunicaron que habían interceptado un misil lanzado desde Yemen. Según informaron, los fragmentos de la interceptación causaron daños menores en unos vehículos aparcados y una escuela.
Poco después, Israel lanzó un ataque masivo contra la capital yemení, Saná, y la ciudad de Hodeida, ubicada en la costa del mar Rojo. Posteriormente, el Ejército israelí confirmó que sus aviones de combate habían atacado objetivos militares pertenecientes a los hutíes en la costa occidental y el interior de Yemen.
Por su parte, el portavoz de los insurgentes, Yahya Saree, confirmó la disposición del grupo para mantener una «larga guerra» contra Israel, añadiendo que no se detendrán «hasta que cese la agresión contra [la Franja de] Gaza».
