RÍO DE JANEIRO — El presidente de Brasil, Luiz Inacio Lula da Silva, se sometió este 19 de diciembre a una tomografía como parte del posoperatorio tras la cirugía de la semana pasada para tratar una hemorragia intracraneal y los resultados fueron buenos, por lo que podrá regresar a Brasilia este mismo día, informaron sus médicos.
«El examen salió muy bien. Su estado general es bueno, el equipo médico le autorizó para ir a Brasilia hoy», explicó en declaraciones a la prensa el médico Roberto Kalil Filho, quien lideró el acompañamiento médico durante los días en que el mandatario estuvo ingresado en el Hospital Sirio Libanés de la ciudad de Sao Paulo.
Lula, de 79 años, fue dado de alta del hospital el 15 de diciembre, y desde entonces se recuperaba en su casa de Sao Paulo, donde ya empezó a recibir visitas de ministros.
Se espera que regrese a Brasilia la tarde y de momento podrá hacer vida normal, aunque con reposo relativo y con dos únicas limitaciones: nada de ejercicio físico ni viajes internacionales, para evitar pasar muchas horas en un avión.
El doctor Kalil resaltó que el hematoma que obligó a operar de urgencia al mandatario ya no existe y que el presidente puede retomar su actividad normal.
«La parte de cognición está perfecta, puede trabajar», afirmó.
Se espera que el 20 de diciembre mantenga una reunión con todos los ministros del Gobierno, ya en Brasilia, pero en lugar de un encuentro de trabajo al uso será un almuerzo navideño más informal. Lula pasará la Navidad y el Año Nuevo en Brasilia y dentro de diez días se someterá a nuevos análisis para verificar cómo evoluciona la recuperación.
