En una alocución pública, la mandataria aseguró que la intervención «no fue estética» sino «necesaria» para su salud.
La presidenta de Perú, Dina Boluarte, admitió haberse sometido a una cirugía que se mantuvo en secreto hasta que su expremier lo reveló en una comparecencia ante el Congreso.
«Sí, fui sometida a una intervención quirúrgica, no fue estética, fue necesaria, imprescindible para mi salud«, dijo en una comparecencia televisiva junto a su gabinete ministerial.
En su intervención, la mandataria interina no solo se limitó a admitir la cuestión, que generó controversias porque no fue notificada al Parlamento, sino que aprovechó para retar a la Fiscal General de la Nación, Delia Milagros Espinoza Valenzuela, para que la cite a comparecer sobre el caso.
«Cuando se dignen a citarme, renunciaré voluntariamente a mi derecho a la confidencialidad médica», aseveró en tono bronco, luego de que esta semana el Ministerio Público peruano anunciara una «investigación preliminar» contra ella «por los presuntos delitos de omisión de actos funcionales» y «abandono de cargo».
El problema de fondo es que la falta de notificación contraviene la legislación local, que exige que la presidenta informe de este tipo de cuestiones al Congreso y al Consejo de Ministros. Boluarte se escudó en el argumento de que la operación no le generó «ningún tipo de incapacidad o impedimento» para ejercer sus funciones, por lo que prescindió de esa formalidad.
«Si me he mantenido en silencio frente a los medios de comunicación ha sido para cautelar mi privacidad (…) pero el morbo creado sobre este caso no puede perpetuarse en el tiempo, cuyo propósito es desestabilizar al Gobierno y construir falsas e inexistentes vacancias», aseveró respecto a la polémica.
Esta semana, además, se han puesto en tela de juicio las leyes promulgadas por el Gobierno mientras Boluarte estuvo de reposo médico, ya que reportes de prensa consideran que las firmas pudieron ser falsificadas. Para la mandataria, ese extremo es una mentira. «Ya no saben qué más inventar», alegó.
«Yo no soy mentirosa»
Tras el escándalo de la cirugía, en el Congreso se ha puesto sobre la mesa el posible pedido de vacancia. Ante ello, Boluarte aseguró que ha sido objeto de «un acoso permanente con el único propósito de generar crisis en el Gobierno» y desconocer los «logros» de su gestión.
«Señora fiscal de la Nación, cíteme a declarar y no contribuya con actuaciones irresponsables y ajenas al debido proceso. Yo no soy mentirosa», aseveró. «Se lo pido, se lo exijo, en aras del debido proceso y la presunción de inocencia», reiteró.