Un obús autopropulsado Akatsia y un mortero son solo algunas de las armas que fueron destruidas en la provincia de Jersón y en la República Popular de Lugansk.
Los operadores rusos de los pequeños pero mortíferos drones FPV (First Person View, en español ‘visión en primera persona’) y de otros vehículos aéreos no tripulados de ataque siguen destruyendo los equipos de artillería del Ejército ucraniano, según varios videos publicados por el Ministerio de Defensa de Rusia.
En uno de ellos, un equipo de operadores de drones de la brigada de infantería de marina de la Flota del Norte detectó y destruyó un obús autopropulsado Akatsia en la provincia de Jersón.
Otro video registró el momento en que un vehículo aéreo no tripulado de ataque destruye un mortero camuflado cerca de la localidad de Grékovka, en la República Popular de Lugansk, Rusia.