Rusia alcanzó instalaciones militares ucranianas con un ataque masivo de un centenar de misiles en respuesta a los ataques en curso contra su territorio, declara el presidente ruso, Vladímir Putin, en su intervención en la reunión de la Organización del Tratado de Seguridad Colectiva (OTSC).
Putin recordó que Rusia dispone de armamento como misiles Kalibr, Kinzhal y Zirkon.
«Esta noche [del 27 al 28 de noviembre] hemos llevado a cabo un ataque integral utilizando 90 misiles de clases similares y 100 aeronaves no tripuladas. Un total de 17 objetivos fueron alcanzados. Se trata de instalaciones militares, instalaciones de la industria de defensa y sus sistemas de apoyo», informó.
Putin enfatizó que Moscú responderá «a los ataques en curso en territorio ruso con misiles de largo alcance de fabricación occidental», incluido con la posible continuación «de las pruebas de Oreshnik en condiciones de combate».
En caso de uso masivo de misiles Oreshnik en un solo ataque, su potencia será comparable al uso de armas nucleares, subrayó.
«Según los expertos militares y técnicos, en caso de una aplicación masiva en grupo de estos misiles, es decir, varios racimos de Oreshnik a la vez en un solo ataque, su potencia, la potencia de este ataque, será comparable al uso de armas nucleares», advirtió.
«Ciertamente, no hay análogos del Oreshnik en el mundo, y creo que tales análogos no aparecerán pronto», explicó Putin.
Los días 19 y 21 de noviembre, Ucrania atacó por primera vez con misiles estadounidenses Atacms y los británicos Storm Shadow instalaciones en las provincias rusas de Kursk y Briansk.
El ataque con misiles Storm Shadow en la provincia de Kursk causó muertos y heridos en un puesto de mando del grupo de tropas Norte.
En respuesta al uso de armas occidentales, el 21 de noviembre Rusia lanzó un ataque combinado contra una empresa del sector militar-industrial de Ucrania, probando en condiciones de combate un nuevo sistema de misiles balísticos de alcance mediano, Oreshnik, en configuración hipersónica sin armas nucleares.
En su alocución televisada, Vladímir Putin advirtió que Rusia decidirá sobre un mayor despliegue de misiles de mediano y corto alcance, y fijará los blancos a destruir durante los ensayos adicionales de esas armas «en función de las acciones de Estados Unidos y sus satélites».
El 22 de noviembre, Putin avanzó que Oreshnik será lanzado a la producción en masa y se incorporará a las Fuerzas de Misiles Estratégicos de Rusia.
El vicepresidente del Consejo de Seguridad de Rusia, Dmitri Medvédev, subrayó que Oreshnik dispone de una ojiva múltiple dirigida individualmente, MIRV, por las siglas en inglés de vehículo de reentrada múltiple e independiente.