El jefe del Comité Militar de la OTAN, el almirante Rob Bauer, declaró que las tropas de la OTAN ya estarían en Ucrania y luchando contra las fuerzas rusas si Moscú no contara con armas nucleares. De esta manera, Bauer está dando la razón a las inquietudes de seguridad de Rusia que le llevaron a iniciar la operación militar especial.
Rusia tenía razón
Con un soberbio desparpajo que cree estar en posición de permitirse, y sintiéndose con la impunidad que más temprano que tarde se le acabará a la OTAN, su jefe del Comité Militar, el almirante Rob Bauer, mostró de forma descarada y sin vergüenza, las intenciones de la Alianza militar con respecto a Rusia. «Estoy absolutamente seguro de que, si los rusos no tuvieran armas nucleares, estaríamos en Ucrania, echándolos a patadas», soltó en una reciente cumbre de defensa en la República Checa.
«Detrás de todo esto [declaraciones de Bauer] hay un contexto, que es la permanente y sistemática idea de las fuerzas dominantes en el Occidente neoliberal, de agredir, de impulsar una respuesta militar a una Rusia que renace. Es como una vieja historia que tiene mucho que ver con la historia de Occidente y sus relaciones siempre complejas y casi siempre conflictivas con la Rusia eterna. Y una de ellas tiene que ver con esta obsesión de Occidente ante una Rusia que no se somete, que tiene intereses y lógicas propias, y que además ellos [Occidente] pensaron en un momento que [Rusia] estaba rota, que se iba a desintegrar, y ahora ven con estupor que 20 años después, esta Rusia cuenta, tiene poder, tiene influencia», reflexiona el analista político Manuel Monereo.
En este contexto, el ministro de Defensa de Rusia, Andréi Beloúsov, ilustró la desesperación de Occidente ante la pérdida de pie geopolítico. «Aspirando a conservar su papel hegemónico, el Occidente colectivo intenta minar la estabilidad regional.
Precisamente por eso durante la cumbre BRICS+, celebrada en Kazán, se dedicó una especial atención a los problemas de la solución negociada de conflictos y a la formación de un orden mundial multipolar justo», dijo durante su intervención en la reunión del Consejo de los Ministros de Defensa de los países de la Comunidad de Estados Independientes [CEI].
Mientras tanto, el asesor presidencial у exsecretario del Consejo de Seguridad ruso, Nikolái Pátrushev, lanzó un ‘mensaje a navegantes’: «No toleraremos la presencia militar marítima permanente de los países que no tienen acceso al mar Negro, porque viola la Convención de Montreux».