El canciller chino destaca el firme apoyo recíproco entre Pekín y Moscú

PEKÍN — El ministro de Exteriores chino, Wang Yi, destacó el fuerte apoyo recíproco que existe hoy en día entre Pekín y Moscú, al reunirse con el secretario del Consejo de Seguridad de Rusia, Serguéi Shoigú.

«Rusia y China se apoyan firmemente de forma recíproca en los asuntos que conciernen a los intereses fundamentales de las dos partes, fomentan constantemente la confianza mutua política, promueven de manera enérgica la cooperación empresarial en diversos ámbitos y han creado un nuevo modelo de relación entre grandes naciones vecinas», señaló Wang.

El jefe de la diplomacia china subrayó también que Moscú y Pekín «han hecho una contribución importante para facilitar la unidad y la cooperación entre los países del sur global.

«Estamos dispuestos a trabajar con el camarada Shoigú y otros colegas rusos para […] mejorar nuestra coordinación en cuestiones estratégicas y generales que afectan a los intereses de seguridad y desarrollo de ambas partes, aumentar constantemente el nivel de confianza mutua estratégica entre las dos partes y enriquecer continuamente el contenido de la cooperación estratégica», afirmó Wang.

Las consultas de seguridad estratégica entre Wang y Shoigú se desarrollan cuando Rusia y China conmemoran el 75 aniversario del establecimiento de las relaciones diplomáticas. El canciller chino recordó que los presidentes Xi Jinping y Vladímir Putin se entrevistaron en tres ocasiones en lo que va de año y «lograron una serie de acuerdos estratégicos».

Por su parte, el secretario del Consejo de Seguridad de Rusia calificó de «modélica» la asociación estratégica con China.

«Nuestra cooperación integral y asociación estratégica es un modelo de interacción entre dos potencias en el mundo contemporáneo. Nuestra relación, sin constituir una alianza político-militar como las articuladas durante la Guerra Fría, es superior a esta forma de vínculos interestatales», puntualizó Shoigú.

Uno de los objetivos más importantes, a juicio de Shoigú, es «hacer frente a la política de doble contención que EEUU y sus satélites vienen aplicando con respecto a Rusia y China, así como «seguir incrementando la coordinación en política exterior, particularmente para crear una arquitectura euroasiática de seguridad igual e indivisible».

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