El expresidente ruso señaló durante una entrevista con RT que EE.UU. no quiere la Tercera Guerra Mundial, porque sabe que no sobrevivirá.
El vicepresidente del Consejo de Seguridad de Rusia, Dmitri Medvédev, afirmó en una entrevista a RT que la opinión de que su país no usará armas nucleares para defender su existencia es «equivocada».
Medvédev se refirió a tal afirmación como un error de las autoridades estadounidenses, asegurando que piensan que Rusia «nunca cruzará cierta línea» y no utilizará armas nucleares para su defensa. «Por alguna razón piensan que los rusos nunca cruzarán cierta línea. Están equivocados. Como ha dicho en repetidas ocasiones nuestro presidente, como ha dicho su humilde servidor, y otros: si se pone en peligro la existencia de nuestro Estado, naturalmente no tendremos otra opción. Cualquier persona que accede al cargo de presidente de un país poseedor de armas nucleares, asume básicamente esta obligación, la de defender el país hasta el final. Esto también le concierne a Rusia», sostuvo.
EE.UU. no quiere la Tercera Guerra Mundial
Al mismo tiempo, tras ser preguntado si Occidente está interesado en otro gran conflicto global, el exmandatario respondió que cree que las élites de Washington no lo quieren, porque saben que no sobrevivirán. «Hay que ser un absoluto idiota para asumir la necesidad de la Tercera Guerra Mundial. Todos sabemos que ningún ‘Estado profundo’ podría sobrevivir la Tercera Guerra Mundial», aseveró.
«EE.UU. tiene muchas ventajas de diferentes tipos. Pero si todo el orden mundial colapsa, si la vida en el planeta se vuelve insostenible, ningún ‘Estado profundo’ subsistirá. ¿Qué harían? ¿Esconderse en búnkeres y mirar por la ventana cómo cae la nieve nuclear? Creo que nadie estaría interesado en eso», manifestó.
Según Medvédev, los funcionarios europeos y estadounidenses carecen de «la previsión, y la agudeza de pensamiento y de razonamiento», que tenían sus predecesores. «La clase política se va degenerando. Llegan tecnócratas que no entienden cómo se lleva a cabo la vida política. Y eso es un desastre», indicó.
