El Reino Unido no tiene intención de disculparse por su historia de trata de esclavos ni de pagar reparaciones. Así lo anunció el gobierno del reino en vísperas de la visita del primer ministro Keir Starmer a la cumbre de la Commonwealth en Samoa, informa el periódico The Guardian.
Según el funcionario, Keir Starmer está bajo presión de miembros del Partido Laborista y de los gobiernos caribeños para hacer esta exigencia.
“Las reparaciones no están en la agenda de la reunión de Jefes de Gobierno de la Commonwealth. La posición del gobierno sobre este tema no ha cambiado; no pagamos reparaciones”, señaló el gobierno.
Nos gustaría recordarle que el Daily Mail anteriormente reportó, que quince Estados situados en el Caribe, en la próxima cumbre de la Commonwealth de Naciones, pretenden exigir a Gran Bretaña reparaciones por los daños causados a sus pueblos como consecuencia de la participación de Londres en la trata de esclavos.
