Tokio incrementó en septiembre sus importaciones interanuales de grano de Moscú en un 998%, según los datos aduaneros japoneses.
De este modo, a pesar de la presión sancionadora y la prohibición de importar una serie de productos rusos, Japón no logra negarse a consumir grano del gigante euroasiático.
Además de cereales, también aumentaron sus importaciones de verduras de Rusia (un 100%) y pescado, un 21,6%. Al mismo tiempo, a pesar del descenso de las compras de hierro, acero y metales no ferrosos, aumentaron las de gas natural licuado (GNL) en un 11,7%.
En conjunto, se produjo un crecimiento relativo de las exportaciones e importaciones hacia Rusia en septiembre: los envíos japoneses ascendieron a 223,6 millones de dólares, mientras que las compras totalizaron 438,5 millones de dólares.
Desde el inicio de la operación militar rusa en Ucrania en febrero de 2022, Japón se sumó a la presión sancionadora de Occidente a Moscú, aprobando 1.316 sanciones individuales y sectoriales contra Rusia, revela la base de datos Castellum.AI.
En concreto, Japón adoptó una lista de bienes y tecnologías cuya exportación a Rusia está prohibida, que ya contiene unos 800 artículos, y también impuso la prohibición de importar oro, máquinas y algunos tipos de madera.
Sin embargo, como informaron anteriormente expertos rusos, Tokio «fue capaz de negociar con Washington el derecho a no rechazar los suministros rusos de gas y petróleo», así como de muchos productos agroalimentarios.
Prueba de ello es el constante aumento de las importaciones rusas de cereales: según las estadísticas publicadas por el Ministerio de Finanzas japonés, en 2023 Japón incrementó las importaciones de grano procedentes de Rusia en un 381,8%.
