El papa Francisco hizo hoy un nuevo llamado para que se eleve el apoyo a nivel mundial en la búsqueda de una solución a la grave situación en Haití, país afectado por la violencia de grupos armados.
Un comunicado divulgado por la Oficina de Prensa de la Santa Sede señala que, tras el rezo del Ángelus al mediodía de este domingo, desde la ventana de su estudio en el Palacio Apostólico Vaticano ante unos 20 mil fieles reunidos en la Plaza de San Pedro, Francisco pidió que “nunca olvidemos a nuestros hermanos y hermanas haitianos”.
“Pido a todos que oremos para que cesen todas las formas de violencia y, con el compromiso de la comunidad internacional, sigamos trabajando para construir la paz y la reconciliación en ese país, defendiendo siempre la dignidad y los derechos de todos”, expresó el sumo pontífice.
El papa aseguró que sigue la dramática situación en esa nación caribeña, “donde continúa la violencia contra la población, obligada a huir de sus hogares en busca de seguridad en otros lugares, dentro y fuera del país”.
Un reporte publicado en el sitio digital del diario Vatican News, refiere que esas palabras del Pontífice estuvieron motivadas por el deterioro de la seguridad haitiana, pues más de tres mil 600 personas murieron allí por día durante el primer semestre de 2024, número superior al registrado en igual período del pasado año.
En la actualidad muchos niños “son reclutados por grupos criminales, que ahora controlan el 80 por ciento de la capital, Puerto Príncipe, tras intensificarse las operaciones policiales por fuerzas multinacionales y locales”, asevera la fuente.
La nota cita informes del Fondo de las Naciones Unidas para la Infancia (Unicef), según los cuales en la actualidad aproximadamente 2,7 millones de personas, entre ellas medio millón de niños, están obligadas a vivir bajo el control de bandas que siguen provocando cientos de muertes.