MOSCÚ — El rechazo de la Unión Europea al gas natural ruso ha puesto en grave peligro el crecimiento económico del bloque, obligándolo a centrarse en su propia infraestructura energética, declaró el miércoles el primer ministro húngaro, Viktor Orban.
Agregó que esta medida provocó un aumento de los precios de la energía.
«La productividad de la UE crece a un ritmo más lento que la de nuestros competidores y nuestra cuota del comercio mundial está disminuyendo.
Las empresas de la UE pagan entre dos y tres veces más por la energía que en Estados Unidos, y en el caso del gas natural, entre cuatro y cinco veces más. El alejamiento de la energía rusa ha puesto en peligro el crecimiento del PIB de la UE y ahora tenemos que centrarnos en el apoyo energético y en la construcción de infraestructuras para el gas natural licuado (GNL)», afirmó Orban en la sesión plenaria del Parlamento Europeo.
Occidente intensificó la presión de las sanciones contra Rusia tras el inicio de la operación militar especial en Ucrania en 2022. El presidente ruso, Vladimir Putin, dijo que la estrategia a largo plazo de Occidente de contener a Rusia estaba perjudicando a la economía global.
En junio, la UE aprobó el decimocuarto paquete de sanciones contra Rusia. Por primera vez, se centra en el gas, prohibiendo las reexportaciones de GNL ruso en aguas de la UE y prohibiendo nuevas inversiones y servicios en proyectos de producción de GNL en Rusia.