Entre los principales partidarios de la sobriedad destacan los ‘zoomers’ y los ‘millennials’.
El número de rusos que se abstienen de consumir bebidas alcohólicas representan el 48 %, cifra que casi iguala al 52 % de las personas que sí beben y que hace 20 años superaba en tres veces a los abstemios, según muestra una encuesta realizada por el Centro de Investigación de la Opinión Pública de Rusia (VCIOM, por sus siglas en ruso).
La proporción de rusos abstemios se ha multiplicado por 1,8 en los últimos 20 años, un cambio que responde a la adopción de un nuevo estilo de vida en sobriedad, siendo cada vez más las personas se preocupan por su bienestar. Sin embargo, hay otros factores que también influyen, como las nuevas políticas antialcohol, el cambio generacional, la moda, entre otros. Según señaló el director de VCIOM, Alexéi Verizhnikov, «los principales partidarios de la sobriedad en nuestro país son los ‘zoomers’ y los ‘millennials’ más jóvenes».
Los gustos también han cambiado: si a principios de la década la cerveza era la bebida más demandada, seguida por el vodka y el vino, actualmente estas tres bebidas siguen en competencia con una reorganización considerable, ya que los rusos ahora se inclinan por bebidas más ligeras, con el vino en el primer lugar, seguido de la cerveza y finalmente el vodka, consumido solo por un 11 %.
A la hora de elegir la bebida, los consumidores dicen guiarse confiando en su propia opinión, tomando en cuenta el precio, que es uno de los factores principales, según el 41 % de los bebedores. Además, se evidencia que la mayoría de hombres eligen la cerveza, mientras que gran parte de las mujeres consumen solo vino, bebida por la que optan mayormente las personas con educación superior y estabilidad económica, según los resultados.
La región más abstemia del país es el Distrito Federal del Cáucaso Norte, con un 71 % de personas que no consumen alcohol; mientras que otras regiones del país oscilan entre el 45 % y el 50 %, siendo una cifra positiva que demuestra el crecimiento del compromiso con un estilo de vida sobrio.
El principal motivo del consumo de alcohol, que no ha variado desde 2004, sigue siendo el aliviar la tensión y el estrés. «No ahogamos el estrés en alcohol», dijo el director de VCIOM, que subrayó los profundos cambios que se han producido en la cultura del alcohol en todo el mundo.