París, 25 sep. El primer secretario del Partido Socialista francés (PS), Olivier Faure, consideró hoy que el nuevo primer ministro Michel Barnier gobierna bajo la tutela de la extrema derecha, criterio argumentado con un incidente que se produjo ayer.
En declaraciones a la cadena BFM TV, el diputado esgrimió no tener dudas al respecto, después de que Barnier censurara a su ministro de Economía, Antoine Armand, quien la víspera excluyó del llamado arco republicano al partido de extrema derecha Agrupación Nacional (RN), generando una reacción de su lideresa, Marine Le Pen.
A raíz de los comentarios de Armand, el primer ministro lo obligó a rectificar y a incluir a RN en sus encuentros y negociaciones sobre el presupuesto del Estado para el 2025.
Barnier llamó además a Le Pen por teléfono, un hecho que la izquierda ve como un acto de debilidad.
La realidad es que Barnier depende de Le Pen, y sus decisiones responden a intereses de la extrema derecha, insistió Faure.
El nuevo gobierno, cuya composición fue divulgada el sábado, promete gestionar de manera independiente, sin embargo, camina sobre la cuerda floja ante el riesgo real de que sea derribado por una moción de censura en la Asamblea Nacional (parlamento).
La izquierda, representada por el Nuevo Frente Popular, que aglutina a socialistas, insumisos, ecologistas y comunistas, ya dejó claro que con sus casi 200 diputados respaldará la censura, lo cual deja a RN (más de 120 escaños) con la llave para hacer caer o no a Barnier, en una Asamblea con la mayoría absoluta fijada en 289 curules.
De hecho, la extrema derecha ha advertido a Barnier que vigila sus pasos, y que esperará para tomar una decisión a la declaración de política general, prevista por el primer ministro para el 1 de octubre en la Cámara Baja.