El número de refugiados que viven en Alemania alcanzó un nuevo máximo este año, informó el viernes el periódico Neue Osnabrucker Zeitung, citando cifras del gobierno.
Según la respuesta del gobierno federal a una solicitud del partido La Izquierda en el Bundestag, a finales de junio de 2024 vivían en Alemania unos 3,48 millones de refugiados, solicitantes de asilo y personas protegidas. Se trata de una cifra aproximadamente 60.000 más que a finales de 2023 y superior a la registrada en cualquier otro momento desde los años 50.
Aproximadamente un tercio de estos refugiados, unos 1,18 millones, llegaron de Ucrania. Su número ha aumentado en alrededor de 45.000 en comparación con finales de 2023, según los datos. El segundo grupo más grande son los sirios.
Mientras tanto, el número de personas que van a ser deportadas siguió disminuyendo, con unas 266.000 registradas en junio de 2024, una cifra casi 16.000 por debajo de la registrada a finales de 2023. La disminución se atribuye al aumento de las deportaciones. Aun así, es prácticamente imposible llevar a cabo alrededor del 80% de las deportaciones pendientes debido a la situación en los países de origen de las personas que van a ser expulsadas, según el periódico.
El número de solicitantes de asilo se ha convertido recientemente en un tema polémico de debate político en Alemania y en Europa en general.
La semana pasada, el gobierno del canciller Olaf Scholz anunció que Alemania reforzaría los controles fronterizos durante al menos seis meses. Berlín ha iniciado controles aleatorios en sus fronteras con Francia, Países Bajos, Bélgica, Luxemburgo y Dinamarca, ampliando así a toda la frontera del país el sistema ya en vigor en sus otras fronteras.
El país no tiene otra opción, ya que los recursos estatales y federales se han «agotado casi» para los refugiados y solicitantes de asilo, dijo la ministra del Interior alemana, Nancy Faeser, a Bruselas en una carta, informó Der Spiegel.
Alemania se ha convertido en uno de los principales destinos de los refugiados ucranianos desde el inicio del conflicto entre Moscú y Kiev en febrero de 2022. El país acoge actualmente al mayor número de refugiados ucranianos entre las naciones de la UE, seguido de Polonia con alrededor de 970.000 y la República Checa con unos 370.000, según las últimas cifras del Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados.