El empresario Steve Witkoff contó que tras oír los disparos, Trump se mostró «estoico, valiente, preocupado por la seguridad de sus amigos antes que por su propia vida».
El empresario Steve Witkoff, que estaba jugando al golf con Donald Trump en el momento en que el político fue víctima de un posible intento de asesinato en su club en West Palm Beach, contó al presentador Sean Hannity, de la cadena Fox News, cómo reaccionaron a los disparos los agentes del Servicio Secreto y el propio candidato republicano.
«Aquí estaba él ayer en un hermoso día, solo intentando descansar y relajarse como el resto de nosotros, y hay un hombre con un […] rifle de asalto que intenta matarlo. Fue terrible. Pero pude ver a un hombre estoico, valiente, preocupado por la seguridad de sus amigos antes que por su propia vida. Fue una inspiración para todos los que estaban a su alrededor ayer. Ojalá todo el país hubiera podido presenciar lo que pasó ayer, porque habrían visto a un auténtico líder«, declaró Witkoff.
Al mismo tiempo, el empresario y amigo de Trump describió el trabajo del Servicio Secreto como «excepcional», afirmando que los agentes ya tenían al presidente a resguardo «tal vez después del primer disparo, sin duda después del segundo». «Así que, cuando sonó el cuarto disparo, el presidente ya estaba en camino con ese equipo», agregó.
Witkoff destacó que sintió alivio al ver que ni Trump ni ninguna de las personas que lo rodeaban resultaron heridas o asesinadas. «Gracias a Dios que [Trump] no resultó herido ni muerto, y gracias a Dios que ninguna de las otras personas tampoco. Por cierto, había muchos civiles, empleados de su oficina, personas que se preocupan por él tanto como yo, otros dos amigos suyos, así que podría haber habido muchos daños realmente graves ahí, y no los hubo», aseveró, agradeciendo a los agentes del Servicio Secreto por su trabajo.
- Los agentes del Servicio Secreto comenzaron a disparar contra el presunto atacante cuando uno de ellos detectó el cañón de un rifle que sobresalía de una valla en el campo de golf en el que se encontraba Trump con sus amigos. El sospechoso, Ryan Wesley Routh, trató de huir del lugar, pero pudo ser detenido gracias a que un testigo hizo una foto de su coche. El incidente se produjo cerca del límite de la propiedad del club del exmandatario estadounidense. El presunto autor del posible ataque estaba escondido entre los arbustos, a unos 400 o 500 metros de Trump.