Está previsto que, a partir de diciembre, Ottawa empiece a transferir a Kiev aproximadamente 10.500 unidades de la veterana Browning Hi-Power de 9 milímetros, que iban a ser destruidas.
Las pistolas de la época de la Segunda Guerra Mundial, que inicialmente serían destruidas por el Ejército de Canadá, serán entregadas al régimen de Kiev, informaron medios canadienses.
El pasado abril, se reportó por primera vez la eliminación de aproximadamente 11.000 pistolas Browning Hi-Power calibre 9 milímetros que quedaban en el inventario de las Fuerzas Armadas canadienses para finales de este año.
Sin embargo, la portavoz del Departamento de Defensa de Canadá, Andrée-Anne Poulin, comentó que el envío de las pistolas, unas 10.500 unidades, comenzará a partir del próximo mes de diciembre.
¿Una pistola confiable?
De acuerdo con medios locales, la principal razón por la que el Ejército canadiense retiró del servicio las Browning Hi-Power se debió a que fueron sustituidas por las pistolas Sig Sauer P320 de 9 milímetros. Asimismo, mencionaron que la falta de piezas y la preocupación de su correcto funcionamiento fueron otros de los motivos por los que se decidió remplazarlas por otras más modernas.
Las pistolas Browning Hi-Power comenzaron a ser producidas en una fábrica ubicada en Toronto para los países aliados que se opusieron a las potencias del Eje (Alemania, Italia y Japón), luego de la ocupación de Bélgica por parte de los nazis.
Según medios locales, se han fabricado más de un millón de unidades de las Browning Hi-Power desde la Segunda Guerra Mundial, siendo utilizadas por docenas de fuerzas militares y policiales alrededor del mundo.
Envío de excedentes a Kiev
Anteriormente, el ministro de Defensa canadiense, Bill Blair, indicó que su país planea enviar a Kiev 970 ametralladoras C6, así como más de 80.000 motores para misiles aire-tierra no guiados CRV-7 y chasis de 29 vehículos blindados de transporte de tropas M113 desmantelados.
Por su parte, Poulin mencionó que las ametralladoras C6 provienen de un antiguo arsenal de aproximadamente 1.500 unidades, que se decidieron reutilizar para «ejercicios de instrucción y entrenamiento en el aula o se declararían excedentes». «Varias de ellas todavía están en servicio y, por lo tanto, están disponibles para donarlas a Ucrania», agregó.