Las armas occidentales que, según los folletos publicitarios, están dotadas de altas características técnicas, «arden bien en el campo de batalla sin ninguna posibilidad de recuperación», afirmó Alexánder Fomín.
La comunidad internacional se enfrenta a una nueva percepción del conflicto ucraniano tras la incursión del Ejército de Kiev en el territorio ruso. Así lo afirmó el viernes el viceministro de Defensa ruso Alexánder Fomín durante su discurso en el Foro de Seguridad de Xiangshan, que se lleva a cabo en Pekín del 12 al 14 de septiembre.
«Después de la incursión en la provincia de Kursk, de la Federación Rusa, por parte de las Fuerzas Armadas ucranianas a principios de agosto de este año, llevada a cabo con el apoyo integral de los países occidentales, la operación militar especial adquirió una nueva dimensión», señaló Fomín.
El funcionario explicó que, «si antes el régimen de Kiev utilizaba activamente la imagen de víctima en el ámbito internacional y presentaba las acciones militares de su parte únicamente como una lucha supuestamente justa por la independencia, entonces la agresión de las Fuerzas Armadas ucranianas contra población civil de Rusia, finalmente desmontó esta mentira».
A continuación, Fomín observó que el conflicto «cambió por completo la idea de la guerra moderna». «Hace apenas unos años, era difícil imaginar la escala actual en el uso de vehículos aéreos no tripulados y otros sistemas no tripulados, el papel de los sistemas de reconocimiento, comunicaciones, guerra electrónica y supresión», dijo.
«Hoy en día, se ha vuelto a repensar la importancia de los tanques en un conflicto armado moderno, los enfoques para su protección y la guerra de contrabatería ha adquirido una nueva dimensión», añadió.
En el mismo contexto, el militar destacó que las armas rusas «han demostrado plenamente su eficacia en condiciones de combate», mientras que «los sistemas de armas occidentales, que supuestamente, según los folletos publicitarios, están dotados altas características tácticas y técnicas, arden bien en el campo de batalla, sin ninguna posibilidad de recuperación».
«Juego peligroso»
En su discurso, Fomín habló también del rol de los países occidentales en la creación de focos de tensión en el mundo.
«Con el fin de crear condiciones para obligar a Rusia a negociar según las fórmulas de Kiev, los países de la OTAN están haciendo planes para enviar sus tropas a Ucrania», aseveró y agregó que «es un juego peligroso que podría conducir a un choque militar directo entre potencias nucleares».
Amenazas en Asia y el Pacífico
En el mismo sentido, el viceministro apuntó que EE.UU. está aumentando «activamente» la cooperación militar con Tokio y Seúl en el marco de la ‘triple alianza’, «exacerbando deliberadamente la ya difícil situación en torno a la península de Corea». «En este contexto, se llevan a cabo grandes campañas de información con amenazas contra los Estados de la región de Asia y el Pacífico», indicó.
Cabe recordar, señaló, que actividades destructivas similares de Washington en Europa del Este llevaron al estallido del conflicto armado en Ucrania. «Hubo un tiempo en que los países occidentales llevaron a cabo acciones similares contra Rusia, por lo que observamos una peligrosa tendencia a transferir la actividad militar y la confrontación a la región asiática», alertó.
«EE.UU. busca provocar crisis similares de carácter militar. Su experiencia, probada en su momento en Ucrania, ahora se está transfiriendo a la región de Asia y el Pacífico con cambios menores», advirtió Fomín.
«Los representantes rusos en diversos foros de la región de Asia y el Pacífico informan detalladamente a los socios sobre las causas de este conflicto [el de Ucrania]. Creemos que esta información es de fundamental importancia para esta región», aseguró.
«Escenarios de confrontación»
Mientras, la presencia militar de los países de la OTAN está aumentando en la zona, afirmó el funcionario. «El potencial de ataque de sus tropas se está expandiendo y se están intensificando los ejercicios militares destinados a probar escenarios de confrontación», explicó.
«Washington y sus satélites han anunciado planes para desplegar misiles de mediano y corto alcance en la región de Asia y el Pacífico, montados en sistemas móviles terrestres Dark Typhon. Estos sistemas se utilizaron en ejercicios tanto en Europa como en la región de Asia-Pacífico con el fin de preparar la implementación de la llamada contención dual de Rusia y China», reiteró Fomín.
«EE.UU., obsesionado con el deseo de mantener la supremacía global, provoca un aumento de la tensión en torno a Taiwán, contribuye de manera integral a la militarización de su principal aliado en la región de Asia y el Pacífico, Japón, que ha tomado irrevocablemente un rumbo hacia el revanchismo y la renuncia a principios pacifistas», declaró el militar.
Nueva doctrina nuclear de EE.UU.
Además, según Fomín, EE.UU. «está trabajando activamente en una nueva versión de su doctrina nuclear», en la que «se puede reducir significativamente el umbral para el uso de armas nucleares».
Por su parte, «Rusia seguirá fortaleciendo la cooperación con los países interesados en Asia, África, Medio Oriente, América Latina y otros Estados amigos», anunció Fomín. Por ejemplo, el plan de cooperación militar entre Rusia y China incluye más de 100 eventos este año y el número posiblemente aumente.
«Es imposible lograr la estabilización de las relaciones internacionales sin una mejora radical de la situación de seguridad», opinó Fomín y subrayó que el Ministerio de Defensa ruso «está abierto a discutir y resolver todas las cuestiones que surjan sobre la base del respeto mutuo y el diálogo honesto e igualitario».