Mientras, la situación en la zona de la central nuclear de Kursk sigue siendo muy tensa, aseveró el canciller ruso.
Las fuerzas rusas están expulsando al Ejército ucraniano de la provincia rusa de Kursk y sin duda acabarán de hacerlo, declaró este jueves el ministro de Asuntos Exteriores de Rusia, Serguéi Lavrov, durante una reunión sobre Ucrania con jefes de misiones diplomáticas en San Petersburgo.
«El número de ataques [ucranianos] selectivos contra objetivos civiles y de ejecuciones de civiles aumenta drásticamente cada día», denunció Lavrov. «Podemos observar todo esto, incluso en el marco de la invasión de las Fuerzas Armadas ucranianas con fines terroristas en la provincia de Kursk, de donde ahora están siendo expulsadas y serán expulsadas con firmeza, no puede haber ninguna duda», aseguró.
Mientras, la situación en la zona de la central nuclear de Kursk sigue siendo «muy tensa», aseveró el canciller ruso.
Durante la visita realizada a finales de agosto a la planta por el director del Organismo Internacional de Energía Atómica (OIEA), Rafael Grossi «se convenció personalmente de la presencia de rastros de ataques criminales por parte de drones ucranianos», continuó Lavrov y agregó que «en Kiev no ocultan que atacaron deliberadamente la central nuclear de Kursk».