La vocera de la Cancillería rusa señaló que las acciones de las autoridades estadounidenses contradicen sus obligaciones de garantizar la libertad de expresión y la multiplicidad de opiniones.
Las reiteradas sanciones para limitar la libertad de los medios de comunicación rusos en EE.UU. son una muestra de la decadencia de sus valores democráticos, aseveró este jueves la portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores de Rusia, María Zajárova.
Durante una rueda de prensa en el Foro Económico Oriental, la vocera describió las nuevas sanciones como una «caza de brujas» y subrayó que se han impuesto porque la Administración actual de EE.UU. intenta asustar a su propio pueblo con la «amenaza rusa» y crear «la apariencia de un trabajo activo» en vísperas de las elecciones presidenciales.
«Se trata del declive de los valores democráticos cuando las autoridades recurren a métodos tan primitivos para influir en sus votantes», sostuvo Zajárova, destacando que el público estadounidense es «deliberadamente engañado» por insinuaciones sobre «intervenciones míticas» de Rusia en los «procesos democráticos» en Estados Unidos. «Cabe recordar que Washington ya ha introducido severas restricciones a la actividad de los medios de comunicación nacionales [de Rusia], lo que, una vez más indica la degradación irreversible del Estado democrático en EE.UU. y su transformación en una dictadura neoliberal totalitaria«, concluyó, insistiendo en que las acciones de EE.UU. contradicen sus obligaciones a la hora de garantizar el libre acceso a la información y el pluralismo de los medios de comunicación.
Asimismo, Zajárova aseguró que las acciones de las autoridades estadounidenses no quedarán sin respuesta y lanzó una advertencia: que todos los intentos de expulsar a los periodistas rusos del territorio de EE.UU. o crear cualquier obstáculo que impida su trabajo allí, se convertirán en la base para tomar medidas de represalia simétricas y asimétricas contra los medios estadounidenses.
- Este miércoles, EE.UU. introdujo sanciones contra el grupo mediático Rossiya Segodnya, RT, RIA Novosti, Sputnik y Ruptly. Las nuevas medidas restrictivas afectan también a la directora del grupo RT, Margarita Simonián, a quien el organismo estadounidense acusó de ser «una figura central en los esfuerzos de influencia maligna del Gobierno ruso», y otros altos ejecutivos del medio.