Desde Kiev prometieron trabajar con sus aliados para garantizar «consecuencias» para la nación asiática.
Ucrania ha amenazado a Mongolia con «consecuencias» por no detener al presidente ruso, Vladímir Putin, para entregarlo a la Corte Penal Internacional (CPI) a su llegada a Ulán Bator este lunes en visita oficial.
Después de que el mandatario aterrizara sin problemas, el portavoz del Ministerio de Asuntos Exteriores ucraniano, Georgui Tijiy, acudió a las redes sociales para quejarse. «El hecho de que el Gobierno de Mongolia no haya ejecutado la orden de detención vinculante de la CPI contra Putin es un duro golpe para la CPI y el sistema de justicia penal internacional», escribió en X.
Además, aseguró que Kiev «trabajará con sus socios» para garantizar que esto tenga «consecuencias» para Ulán Bator.
Putin llegó a Mongolia tras haber recibido la invitación del mandatario del país, Ukhnaagiin Khurelsukh, para participar en los actos conmemorativos dedicados al 85.° aniversario de la victoria conjunta de las Fuerzas Armadas soviéticas y mongolas sobre los militares japoneses en la batalla de Jaljin Gol en septiembre de 1939.
La visita del mandatario ruso a Mongolia es la primera que realiza a un Estado miembro de la CPI desde que el año pasado el tribunal, con sede en La Haya, emitiera una orden de detención en su contra.