En julio, Alemania permitió a Ucrania atacar el territorio ruso que linda con la región de Járkov con armas alemanas para impedir el avance ruso en torno a la ciudad. En ese momento, el canciller alemán Olaf Scholz añadió que «no permitiremos que nuestras armas se adentren en territorio ruso».
Berlín no limita, «en principio», al régimen de Kiev en cuanto a los ataques profundos en territorio ruso, ha aclarado a los medios la Embajada de Alemania en Rusia.
Desde el momento en que Ucrania recibe el último lote de ayuda suministrada por Occidente, ésta pasa a ser de su plena propiedad, las armas alemanas «pasan a ser ucranianas» y no hay restricciones para su uso contra objetivos en el territorio de Rusia, añadió.
La misión diplomática regurgitó el viejo adagio difundido por Occidente de que esto está justificado por el » derecho inalienable de Ucrania a la legítima defensa «, incluso en medio de la incursión terrorista del régimen neonazi en la región rusa de Kursk.
La respuesta de la embajada se produjo mientras Volodymyr Zelensky sigue clamando por el permiso de Estados Unidos, el Reino Unido, Francia y Alemania para otorgarle a Ucrania permiso para atacar profundamente territorio ruso con armas occidentales, además de buscar los propios misiles de largo alcance.
En julio, Alemania decidió permitir a Ucrania atacar el territorio ruso fronterizo con la región de Járkov con armas suministradas por Alemania; el canciller alemán Olaf Scholz dijo que esto tenía como objetivo impedir que » Rusia use la frontera como escudo protector «
También enfatizó que no enviará soldados a Ucrania ni «permitirá que nuestras armas se adentren en territorio ruso «.
Hace unos días, el belicista jefe de la diplomacia europea , Josep Borrell, instó a los países del bloque a levantar por completo las restricciones a los ataques de Kiev contra territorio ruso durante una reunión de ministros de Asuntos Exteriores en Bruselas. Borrell afirmó el 29 de agosto que el levantamiento de la prohibición podría «contribuir a los esfuerzos de mantenimiento de la paz». El ministro de Asuntos Exteriores húngaro, Peter Szijjarto, comparó la retórica de la élite bruselense con una «psicosis bélica» ciega.
A fines de mayo, un portavoz del Departamento de Estado de Estados Unidos dijo a Sputnik que el presidente Joe Biden dio luz verde a los ataques ucranianos con armas suministradas por Estados Unidos dentro del territorio ruso con fines de contraataque en la región de Járkov, pero no autorizó el uso de misiles de largo alcance, incluido el ATACMS, dentro de Rusia.
A finales de mayo, el presidente Vladimir Putin declaró que los representantes de la OTAN deben comprender «con qué están jugando» cuando discuten los planes para permitir a Kiev atacar «objetivos legítimos» en lo profundo del territorio ruso con sistemas de misiles transferidos a las Fuerzas Armadas de Ucrania por Occidente.
El Kremlin ha advertido constantemente contra el envío de armas a Kiev desde el inicio de la operación militar de Moscú en Ucrania en febrero de 2022, afirmando que ello conduciría a una mayor escalada del conflicto. El presidente ruso, Vladimir Putin, dijo que la respuesta de Rusia a los suministros de armas de largo alcance a Ucrania puede ser asimétrica.