En 2017, los servicios secretos de Francia y Emiratos Árabes Unidos intervinieron los teléfonos del empresario de origen ruso.
El presidente de Francia, Emmanuel Macron, propuso al cofundador de Telegram, Pável Dúrov, trasladar la sede de su plataforma de mensajería a París durante un almuerzo que ambos compartieron en 2018, pero la propuesta fue rechazada por el empresario de origen ruso, informó el diario The Wall Street Journal, que cita fuentes anónimas cercanas al tema.
Según una de las fuentes, en aquella cena también se abordó el tema de la concesión a Dúrov de la nacionalidad francesa, que posteriormente recibió. Además, el diario asegura que, un año antes, los servicios secretos de Francia y de Emiratos Árabes Unidos habían intervenido los teléfonos del empresario de origen ruso.
La operación de espionaje, cuyo nombre clave era ‘Purple Music’, arrancó en medio de las serias preocupaciones de las autoridades francesas en relación posible uso de Telegram por el grupo terrorista ISIS «para reclutar combatientes y planificar atentados».
Una fuente cercana a Dúrov aseguró al periódico que durante muchos años la empresa recibió citaciones y órdenes judiciales por parte de las fuerzas de seguridad, que la empresa ignoró. La fuente no especificó de qué países procedían dichas citaciones.
«Es decir, también es algo personal», estimó el politólogo y periodista ruso Gueorgui Bovt y observó que Macron «puede ser terriblemente susceptible» y Dúrov, «como muchas personas ricas y famosas, puede tener una gran confianza en sí mismo en el fondo». «En realidad, [Dúrov] engañó al presidente francés. Tomó la ciudadanía, no se negó, pero no mostró respeto por el pedido de la dirigencia del país», aclaró.
Dúrov, de 39 años, fue detenido el pasado sábado en la pista del aeropuerto París-Le Bourget al bajar de su avión privado, que aterrizó en la capital francesa procedente de Azerbaiyán. El empresario tenía una orden de búsqueda emitida por la oficina de menores (OFMIN) de la Dirección Nacional de Investigación Criminal francesa sobre la base de una investigación preliminar.
Según la Fiscalía de París, Dúrov está acusado de 12 delitos vinculados a «conspiración criminal«, «blanqueo de delitos«, permitir transacciones ilícitas a una banda organizada y a delitos conectados con la criptología, pornografía, entre otros.