Un portavoz de Downing Street aseguró que «no ha habido ningún cambio en la postura» de su país respecto al uso de esos misiles.
El Reino Unido no ha autorizado a las Fuerzas Armadas ucranianas a utilizar los misiles de largo alcance Storm Shadow en sus intentos de incursión en la provincia rusa de Kursk, informa The Telegraph.
Un portavoz de Downing Street afirmó, en declaraciones al periódico, que «no ha habido ningún cambio en la postura» de su país respecto al uso de esos misiles para atacar objetivos dentro de territorio ruso.
«Hemos estado suministrando ayuda militar para apoyar el claro derecho de Ucrania a la autodefensa contra los ataques ilícitos de Rusia, de acuerdo con el derecho humanitario internacional», indicó el vocero, y reiteró que para Londres «está claro» que las armas que proporciona a Kiev «están destinadas a la defensa de Ucrania».
En julio pasado, el primer ministro británico, Keir Starmer, dijo a los periodistas que los Storm Shadows podían usarse exclusivamente «con fines defensivos». «Pero corresponde a Ucrania decidir cómo desplegarlos para esos fines defensivos», fueron las palabras de Starmer, que muchos interpretaron como que Londres le daba permiso a Kiev para utilizar estos misiles de crucero guiados, que tienen un alcance de más de 250 kilómetros, para atacar objetivos militares en el interior del territorio de Rusia.
Sin embargo, el Ministerio británico de Defensa tuvo que salir luego a aclarar que no hay tal autorización.