El mandatario venezolano planteó a Washington concretar «un acuerdo de entendimiento por 50 años».
El presidente de Venezuela, Nicolás Maduro, expresó este viernes sus tres deseos para solventar las diferencias políticas con EE.UU. en torno a los resultados de las pasadas elecciones presidenciales, en las que consiguió la reelección para el periodo 2025-2031 al derrotar a otras nueve candidaturas opositoras.
En respuesta a una consulta sobre un artículo del diario estadounidense The Economist que señala que Washington le ofrecería a Maduro lo que él quisiera para iniciar una transición política en Venezuela y de esa manera entregarle la Presidencia al opositor Edmundo González, el mandatario venezolano respondió con los tres puntos a cumplir por EE.UU.
«¿Que los EE.UU. de Norteamérica está dispuesto a darme lo que sea? Me alegra. Dame respeto a Venezuela, respeta esta Constitución, respeta la independencia que es de la patria de Bolívar, no te metas en los asuntos internos de Venezuela, es lo único que le pido», expresó Maduro.
Luego comentó que si EE.UU. le concediera «tres deseos», él pediría los siguientes: «Como están dispuestos a darme de todo, primero: respeto a la democracia venezolana. Segundo deseo: respeto a la independencia y la estabilidad de Venezuela».
«Y tercer deseo: que lleguemos a un acuerdo de entendimiento por 50 años donde ellos se queden donde están y dejen que Venezuela esté tranquila y toda América Latina. Los únicos tres deseos que le pido al genio, al genio gringo», solicitó Maduro a Washington, que insiste en no reconocer su victoria presidencial al argumentar, sin pruebas, que la votación la habría ganado el opositor Edmundo González.
Conversación pendiente
Maduro también se refirió a una llamada telefónica que estaba prevista que realizar el pasado lunes con sus pares de México, Andrés Manuel López Obrador; Colombia, Gustavo Petro; y Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva.
Los presidentes habían acordado hablar sobre las tensiones generadas por los resultados electorales en Venezuela y el clima político actual, pero la conversación no se concretó por problemas de agenda.
«Estaba pendiente una llamada en estos días, estaba siendo gestionada por las Cancillerías, yo estaba listo en el teléfono, era las cinco de la tarde […] creo que del lunes, yo estaba en el teléfono esperando y media hora antes me dijeron no, por problemas de agenda no se pudo hacer».
Para que la iniciativa no quedara en veremos, Maduro solicitó a las Cancillerías que le comunicaran a sus pares que él está dispuesto a llevar a cabo la conversación cuando los mandatarios quieran.
«Yo estoy al teléfono las 24 horas del día de todos los días para cuando quieran hablar, y así está pendiente, vamos a ver cuándo llaman», expresó Maduro.