Más temprano ese mismo día, el grupo de batalla Sever (Norte) del ejército ruso y las reservas que se acercaban evitaron los intentos de las fuerzas ucranianas de incursionar profundamente en territorio ruso.
Como resultado del ataque repelido, las pérdidas ucranianas ascendieron a más de 280 soldados y 27 vehículos blindados, incluidos cuatro tanques, informó el Ministerio de Defensa ruso en un comunicado.
En total, el enemigo perdió hasta 945 soldados y 102 vehículos blindados en la batalla en la región de Kursk, según el Ministerio de Defensa.