Tras perder su contrato con Apple, una de las últimas fábricas de microchips del Reino Unido ya dejó de aceptar pedidos.
Los proyectos militares británicos secretos se encuentran en riesgo por la amenaza de cierre de una planta de microchips de la empresa estadounidense de semiconductores Coherent, informa The Telegraph.
Coherent ya no acepta pedidos y anunció su intención de vender la fábrica, situada en el condado de Durham, después de que el gigante tecnológico Apple dejara de comprar sus chips. La decisión afecta a muchas compañías tecnológicas y empresas militares, que también necesitan chips para fabricar diferentes tipos de armamento. Así, entre los compradores de los chips elaborados en la planta británica figura Leonardo, empresa italiana de defensa que fabrica en el Reino Unido sistemas de radar, equipos de guerra electrónica y helicópteros. Además, esta planta también ha suministrado microchips para el avión Typhoon y otros tipos de armas británicas.
El posible cierre obligará a Leonardo y a otras compañías a buscar otros proveedores, lo que podría tener un impacto negativo tanto en la economía británica como en la industria de defensa del país. Actualmente solo hay dos instalaciones en el Reino Unido dedicadas al procesamiento comercial de semiconductores de arseniuro de galio, lo que hace que la planta de Coherent sea especialmente importante.
Según una fuente, aún podría surgir un inversor que salve la fábrica. Mientras tanto, en medio de esta crisis, el Gobierno británico ha anunciado una estrategia de 1.000 millones de libras esterlinas (1.271 millones de dólares) para crear una industria de fabricación de semiconductores. Sin embargo, los críticos denuncian que ese monto no va a desarrollar ni ayudar a las industrias, ya que dicha inversión es insignificante.