EEUU prepara la siguiente fase de una campaña de denigración de los atletas rusos destinada a aislar a Rusia en el deporte mundial, declaran desde el Servicio de Inteligencia Exterior ruso (SVR). Sin embargo, el comportamiento descaradamente antideportivo de Occidente «es cada vez más rechazado» por la mayoría, destacan.
«Esta vez, se está preparando una serie de ‘publicaciones de investigación de alto nivel’ sobre presuntos abusos de dopaje revelados en el deporte ruso de alto nivel. La atención se centra en disciplinas en las que nuestro país [Rusia] es un líder mundialmente reconocido», revelan desde el organismo.
Se precisa que se trata de gimnasia rítmica, natación sincronizada y patinaje artístico. Desde la entidad agregan que Washington quiere denigrar a las escuelas deportivas famosas, a los entrenadores destacados y a los atletas rusos.
Según los informes de inteligencia, estos difamatorios materiales servirían para convencer a los aficionados de todo el mundo de que la potencia y belleza de las gimnastas, nadadoras sincronizadas y patinadoras artísticas rusas son solo el resultado de unas drogas milagrosas.
El proyecto está supervisado por los antiguos jefes del laboratorio antidopaje de Moscú, los desertores Grigori Rodchenkov y Timofei Sobolevski. En Occidente creen que estos dos han mantenido vínculos estables con entrenadores y médicos implicados en el entrenamiento de atletas rusos, añaden desde el organismo.
Según el servicio, la principal dificultad para los organizadores del montaje es fabricar acusaciones de violaciones en deportes en los que Rusia ha dominado inequívocamente durante décadas sin ningún atisbo de dopaje.
Por eso, a Rodchenkov y Sobolevski se les encomendó la tarea de no refrenar su imaginación, señalan. Y en los contactos con presuntos informantes, se les aconseja que no sean tacaños con las promesas de generosos honorarios y la perspectiva de mudarse a Occidente, indican desde la Inteligencia rusa.
«No queda más remedio que asombrarse de la arrogancia, la mezquindad y, sobre todo, la miopía de Occidente. Al fin y al cabo, su comportamiento descaradamente antideportivo es cada vez más rechazado por la mayoría mundial», agregan desde el Servicio de Inteligencia Exterior.
Los atletas y entrenadores rusos, han sido, son y serán objeto de admiración para los aficionados de todo el mundo que quieren ver el deporte al margen de la política, resumen.