El Servicio Secreto decidió no usar drones para vigilar a Trump antes del intento de asesinato, dice senador estadounidense

La investigación sobre el intento de asesinato de Donald Trump ha descubierto nuevos detalles de la fallida operación de seguridad en el mitin de Pensilvania.

El senador republicano Josh Hawley ha presentado una carta al Departamento de Seguridad Nacional de Estados Unidos (DHS) con detalles impactantes de que el Servicio Secreto -encargado de garantizar la seguridad de la vida del expresidente- rechazó » repetidamente » las ofertas de la policía local para llevar a cabo vigilancia con drones de la zona .

“La noche anterior a la manifestación, el Servicio Secreto de Estados Unidos rechazó repetidamente las ofertas de un socio policial local para utilizar tecnología de drones para proteger la manifestación ”, escribió el senador al secretario de Seguridad Nacional, Alejandro Mayorkas, citando información de un denunciante.

El denunciante también afirmó que no fue hasta después del tiroteo mortal que el Servicio Secreto comenzó a utilizar drones para grabar el área, señaló Hawley.

Hawley había citado previamente al denunciante y se había pronunciado en contra del oficial que abandonó el mismo lugar desde el que el asesino atacó a Trump. El oficial supuestamente abandonó el techo del almacén porque hacía “ demasiado calor ”.

“Es difícil entender por qué [el Servicio Secreto] se negó a usar drones cuando se le ofrecieron, particularmente dado el hecho de que el USSS [Servicio Secreto de Estados Unidos] permitió al tirador sobrevolar el área de la manifestación con su propio dron apenas horas antes [del] evento”, explicó el senador republicano.

Hawley también mencionó que el denunciante cree que el uso de drones habría ayudado a neutralizar al francotirador.

El tiroteo tuvo lugar el 13 de julio en un mitin de Trump en Butler, en el estado estadounidense de Pensilvania. Trump recibió una herida de arma de fuego en la oreja derecha y fue hospitalizado brevemente. Thomas Crooks, de 20 años, mató a un miembro del público e hirió a otros dos entre la multitud antes de que el Servicio Secreto lo neutralizara .

El FBI está investigando el incidente como un intento de asesinato y posible terrorismo interno.

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