Roland Walker se puso el objetivo de duplicar la capacidad del Ejército para 2027 y para finales de la década lograr que pueda destruir una fuerza enemiga al menos tres veces mayor.
El Ejército británico en tres años debe estar listo para librar una guerra contra Rusia, China, Irán y Corea del Norte que forman un «eje de agitación«, declaró este martes Roland ‘Roly’ Walker, el nuevo jefe del Estado Mayor del Reino Unido, al margen de una conferencia sobre guerra terrestre celebrada en estos días en Londres.
El alto cargo militar advirtió de que los países mencionados están estrechando lazos entre sí, comparten armas y tecnologías y supuso que para los años 2027-2028 «esta convergencia» podría llegar a tal punto de «una crisis específica» que la «capacidad para abordarla de forma aislada» disminuiría «significativamente».
«Un problema en un área probablemente desencadene una detonación simpática [secundaria] en otra y, por lo tanto, es un problema global visto desde diferentes perspectivas en todo el mundo», recogen las palabras de Walker medios locales.
En este contexto, el general Walker indicó que un potencial conflicto no es inevitable, pero al mismo tiempo vaticinó sobre una posible «invasión» china a Taiwán, las supuestas aspiraciones de Irán de desarrollar armas nucleares y la «amenaza» que representa Corea del Norte. Ante esta situación, indicó que su objetivo es duplicar la capacidad del Ejército británico para 2027 y para finales de la década lograr que pueda destruir una fuerza enemiga al menos tres veces mayor.
Además, supuso que el presidente de Rusia, Vladímir Putin, independientemente de cómo acabe el conflicto en torno a Ucrania, será «muy, muy peligroso» y quedará «con ganas de represalia» contra los países occidentales que prestaron apoyo al régimen de Kiev. «El punto aquí es que cuando piensas que ellos [los rusos] han caído, volverán rugiendo para vengarse», manifestó.
A finales de junio, el presidente ruso aseguró que Moscú seguirá mejorando sus Fuerzas Armadas, «teniendo en cuenta la difícil situación internacional y la aparición de nuevos retos y riesgos», pero al mismo tiempo destacó que Rusia está dispuesta a discutir ampliamente cuestiones relacionadas con la creación de un sistema de seguridad euroasiático con diversas asociaciones, incluida la OTAN.