El expresidente brasileño participó en un acto días después de la divulgación de un audio que lo implica en una presunta red de espionaje.
El expresidente brasileño Jair Bolsonaro defendió públicamente a Alexandre Ramagem, exdirector de la Agencia Brasileña de Información (Abin) y acusado de espiar de manera ilegal a jueces, parlamentarios y periodistas durante su administración (2019-2022).
A pesar de la divulgación de unos audios esta semana que lo implican directamente en la trama, el ultraderechista no dudó en participar el jueves en un evento en Río de Janeiro, donde mostró su apoyo a Ramagem, precandidato a la alcaldía de la ciudad.
«Está pagando el precio de la valentía», aseguró Bolsonaro en un breve su discurso.
«Ramagem, a quien conocí durante la transición de 2018, ya está empezando a pagar un alto precio por su audacia al querer pensar, soñar y gestionar una ciudad con respeto, honor y orgullo», continuó.
Uso de recursos del Estado
Según las investigaciones, la presunta red de espionaje fue montada con recursos del Estado y utilizó sistemas GPS para rastrear teléfonos celulares sin autorización judicial.
La Policía acusa a Ramagem de dirigir la red —en la que se sospecha que estaba implicado el concejal de Río de Janeiro, Carlos Bolsonaro, hijo del expresidente—, y que fue utilizada para gestionar asuntos de la familia del ultraderechista.
En el evento, Bolsonaro también cargó contra el mandatario Luiz Inácio Lula da Silva y recordó que no le colocó la banda presidencial, ya que se marchó a EE.UU. dos días antes de su toma de posesión. «Algunos pensaron que le iba a pasar la banda a ese tipo, pero yo no paso la banda a un ladrón», aseveró.
También lamentó el atentado contra el expresidente estadounidense Donald Trump y mencionó la puñalada que él sufrió en 2018 durante un mitin de campaña. «¿Se han dado cuenta que solo el que es conservador y es de derecha sufre ataques?», cuestionó.