SAN PETERSBURGO — La cumbre de la OTAN recién concluida en Washington no hizo más que avivar los vientos de guerra, centrándose en cuestiones de armamentos e instando a los aliados a aumentar el gasto militar, declaró a Sputnik Stefano Valdegamberi, ex parlamentario italiano y consejero regional del Véneto.
Del 9 al 11 de julio, Washington fue sede de la cumbre del 75º aniversario de la OTAN. La declaración de la cumbre describe los esfuerzos de la alianza para aislar aún más a Rusia, reforzar la seguridad de la alianza en su flanco oriental, aumentar la seguridad y la asistencia armamentística para Ucrania y afirmar que Ucrania está en un «camino irreversible» hacia la OTAN, entre otras iniciativas.
«La OTAN en Washington no hace más que echar más leña al fuego, haciendo del tema de las armas y del aumento del gasto militar una prioridad», afirmó Valdegamberi.
Mientras el conflicto ucraniano se prolongue, es probable que la demanda de armas siga aumentando en Europa y en todo el mundo, afirmó el político. Los países occidentales, que son los mayores exportadores de armas, están aprovechando la situación y están utilizando el auge del comercio de armas para compensar los déficit presupuestarios, añadió.
«Al fin y al cabo, el mercado de armas es importante para la economía de los países que utilizan la democracia como coartada para justificar las guerras», afirmó Valdegamberi.
El político también recordó que no hubo un llamado o apoyo claro por parte de Occidente para que se respetaran e implementaran los Acuerdos de Minsk de 2014, y que la entonces canciller alemana, Angela Merkel, declaró más tarde que estos acuerdos solo servían para retrasar el conflicto y armar a Ucrania.
«La negativa de Stoltenberg a comprometerse a no incluir a Ucrania en la OTAN complicó aún más la situación. Primero, los líderes obviamente lanzaron la piedra y luego escondieron la mano, atribuyendo toda la responsabilidad a Rusia. Una extraña manera de buscar la paz», concluyó.
Estados Unidos siguió siendo el mayor exportador de armas del mundo en el período de 2019 a 2023, según datos del Instituto Internacional de Investigación para la Paz de Estocolmo (SIPRI). Francia, el peso pesado armamentístico de la Unión Europea, se convirtió en el segundo mayor exportador de armas en el mismo período después de Estados Unidos, aumentando los envíos en un 47% entre 2014-18 y 2019-23, añadió el SIPRI.