El bloque sudamericano tendrá una nueva cumbre en el marco de las tensiones entre el presidente argentino y su par de Brasil, Luiz Inácio Lula da Silva.
Paraguay acoge este lunes la 64.ª cumbre del Mercado Común del Sur (Mercosur), que reúne cada seis meses a los jefes de Estado de los países miembro y representantes de las naciones asociadas.
Este encuentro, que se realizará en Asunción, capital del país, será el último bajo la Presidencia ‘pro tempore’ paraguaya, que pasará el mando a Uruguay.
Confirmaron presencia los presidentes de los Estados Partes del Mercosur, Luiz Inácio Lula da Silva (Brasil); Luis Lacalle Pou (Uruguay) y Santiago Peña como anfitrión, mientras que Argentina estará representada por la canciller Diana Mondino.
El mandatario argentino Javier Milei decidió no acudir a la cumbre en un acto de desaire al bloque sin precedentes. El mismo día, el libertario asistirá a la Conferencia de Acción Política Conservadora (CPAC, por sus siglas en inglés), que se llevará a cabo en en el balneario de Camboriú, Brasil, y que tendrá entre sus invitados al expresidente ultraderechista Jair Bolsonaro.
Sí estará presente el presidente de Bolivia, Luis Arce, que se suma como representante de un nuevo miembro pleno luego de que el Congreso sancionó el miércoles el protocolo de adhesión.
Se espera también la presencia del presidente de Panamá, José Raúl Mulino, como invitado, además de cancilleres y representantes de los demás países asociados. Habrá delegaciones de Chile, Ecuador, Colombia y Guyana.
Tensión entre dos socios
La decisión de Milei de no participar en la cumbre del Mercosur se produce tras un nuevo cruce verbal con el presidente brasileño Lula da Silva, que acrecentó las diferencias entre ambos líderes. El conflicto pone en tensión a dos socios estratégicos de la región, con un peso decisivo dentro del bloque comercial.
El mandatario argentino calificó a su par de comunista, ladrón y corrupto. Lula espera que Milei «pida disculpas» a él y a todo Brasil, porque «ha dicho muchas tonterías». La disputa parece no tener retorno, porque Milei sostiene sus dardos verbales: «¿Desde cuándo hay que pedir perdón por decir la verdad?», lo desafió.
Sin embargo, el vocero presidencial de Argentina, Manuel Adorni, negó que la ausencia de Milei en Asunción esté relacionada con este conflicto. «No tenemos ningún problema en presentarnos en ningún lugar donde esté Lula. (El presidente) Jamás dejaría de asistir a una actividad por sus propios dichos», aseguró Adorni en una de sus ruedas de prensa diarias.
Además, aseguró que el jefe de Estado argentino, que viajó el sábado hacia Brasil, no se reuniría con su homólogo brasileño porque priorizaría «otras reuniones». Aunque confirmó un encuentro con Bolsonaro en su agenda, se sabe que coincidirá con el exmandatario y rival político de Lula da Silva.
El Ministerio de Relaciones Exteriores de Brasil consideró «lamentable» la ausencia del presidente argentino. La representante de la Cancillería de Brasil para América Latina y el Caribe, embajadora Gisela María Padovan, afirmó que no es «deseable» que un presidente argentino se ausente en este evento diplomático regional, y remarcó que sería «la primera vez que sucede».
La incorporación de Bolivia
Esta nueva cumbre tendrá como novedad la incorporación de Bolivia como miembro pleno del Mercosur, luego de que el presidente Luis Arce promulgó la Ley 1567, el Protocolo de Adhesión que ya había sido aprobado por la Asamblea Legislativa Plurinacional.
El trámite, iniciado en 2015, necesitó el respaldo de los Parlamentos de Argentina, Brasil, Paraguay y Uruguay.
Arce aprovechará su viaje a Asunción para depositar el instrumento de adhesión, y a partir de ese momento se abre un plazo de 30 días para su entrada en vigor. El país andino tendrá un plazo de hasta cuatro años para incorporar el acervo normativo del Mercosur y, de esa manera, completar el proceso, explicó la Cancillería de Paraguay en un comunicado.
«La incorporación de Bolivia como país miembro del Mercosur tiene un carácter estratégico, porque significa ser parte de un importante espacio de integración regional, intercambio comercial, fortalecimiento productivo y nos convierte en un eje articulador en la región», afirmó Arce en un mensaje publicado en su cuenta en X.
Acuerdo con China
Por otra parte, se abre con más fuerza para el Mercosur la chance de avanzar hacia un tratado de libre comercio con China, una iniciativa que había sido impulsada en 2022 por el presidente de Uruguay, Luis Lacalle Pou, pero que se topó entonces con la resistencia de Argentina y Paraguay.
La decisión de Montevideo de negociar el tratado con Pekín de forma bilateral, provocó tensiones en el bloque, porque contraviene una regla interna según la cual toda negociación con terceros países tiene que contar con el aval del resto de los socios.
Recientemente, la Cancillería de Brasil se mostró dispuesta a apoyar la apertura de negociaciones con el gigante asiático, siempre y cuando el resto de los países miembro acompañen la decisión. «No habría ningún problema en abrir conversaciones con China si vamos todos juntos», expresó en rueda de prensa Padovan.