Madrid, 2 jul (Prensa Latina) La estigmatización de los migrantes en España es cada vez más un problema exacerbado en redes sociales y también de cierta clase política, en especial con el tema de los menores.
A esta conclusión llega el Informe Anual de Monitorización del Discurso de Odio en Redes Sociales, presentado hoy por el Gobierno, cuando está en el debate político la reasignación de menores no acompañados entre diversas Comunidades Autónomas españolas.
Al respecto, el presidente de Canarias, Fernando Clavijo, remarcó este martes que el reparto de los menores inmigrantes entre las regiones es un asunto humanitario, y no territorial, pues, “se trata de niños y de niñas que quieren llegar a Europa”.
Recordó que son infantes que pasan siete u ocho días en una patera (embarcación), y algunos de ellos tienen que tirar por la borda a sus hermanos muertos, por lo que la inmigración de los menores ‘no son las tonterías de las que algunos hablan’.
Clavijo afirmó que es necesario un pacto de Estado como ha pedido el presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, al líder del opositor Partido Popular (PP), Alberto Núñez Feijoo.
Por su parte, en rueda de prensa, la ministra de Inclusión, Seguridad Social y Migraciones, Elma Saiz, denunció la proliferación de este fenómeno y que el 45,5 por ciento de los comentarios de odio sobre ellos buscan relacionarlos directamente con la inseguridad ciudadana.
Según el Informe Anual de Monitorización del Discurso de Odio en Redes Sociales, el lenguaje es agresivo en un 65,9 por ciento de los casos, sin tener en cuenta que se trata de niños sin la tutela de sus padres u otros familiares en un país que no es el suyo y en una situación de extrema vulnerabilidad.
El texto puntualiza que las personas originarias del norte de África y el Islam son los objetivos prioritarios de esos discursos: 33,7 y 26,2 por ciento del total, respectivamente.
‘Esta estigmatización genera un ambiente hostil. Además, puede alimentar el miedo y resentimiento hacia ciertos grupos de la población, arrastrándonos a una mayor fragmentación y conflicto social’, indicó el análisis.
Especialmente en Islas Canarias ingresan de manera irregular varias decenas de miles de personas cada año por vía marítima, en su inmensa mayoría procedentes de Africa.
Actualmente hay cerca de seis mil niños en Canarias, lo cual ha desbordado la capacidad de acogida de las autoridades insulares, y de ahí el reclamo de que distribuir a los infantes en varias comunidades.
Se calcula que España recibió este año a más de 24 mil personas de forma irregular por sus costas.