MOSCÚ — El Comité de Investigación de Rusia llegó a la conclusión de que el avión de transporte militar IL-76 con 65 prisioneros ucranianos a bordo, derribado a principios de 2024 sobre la provincia rusa de Bélgorod por un misil tierra-aire lanzado desde Ucrania, no tenía defectos técnicos.
«En el momento del ataque, el avión se encontraba en buenas condiciones técnicas: todos sus sistemas funcionaban con normalidad, según confirma la lectura de los datos del registrador de vuelo», afirmó el Comité de Investigación.
Según el ente, los mandos de la Dirección General de Inteligencia y las Fuerzas Armadas de Ucrania «sabían con certeza» que el avión transportaba a 65 connacionales para un intercambio con Rusia, y aun así «dieron la orden de destruirlo» con misiles guiados del sistema antiaéreo estadounidense Patriot.
«El primer misil alcanzó la aeronave a una altitud de casi 4.000 metros; el segundo erró el objetivo y se autodestruyó», precisó el Comité.
El organismo sabe qué unidades militares de Ucrania están equipadas con dichos sistemas de misiles y siguen trabajando en cooperación con el Ministerio de Defensa de Rusia para «identificar a oficiales concretos implicados en la organización de ese ataque terrorista para llevarlos ante la justicia penal».
El 24 de enero, el Ministerio de Defensa de Rusia informó que la aeronave de transporte militar IL-76 con 65 prisioneros ucranianos a bordo, transportados para un intercambio, se estrelló en la provincia rusa de Bélgorod. Además de los prisioneros ucranianos, iban a bordo nueve militares rusos, entre ellos seis tripulantes. Todos los ocupantes del IL-76 murieron.
El Comité de Investigación de Rusia confirmó posteriormente que el avión de transporte militar fue derribado desde el lado ucraniano con el uso de misiles estadounidenses MIM-104A de una batería antiaérea Patriot.
En el lugar de la catástrofe se recuperaron más de 670 fragmentos de cuerpos que las pruebas forenses identificaron como pertenecientes a seis miembros de la tripulación, tres efectivos de la policía militar y 65 soldados ucranianos. Desde Rusia insisten en una investigación internacional del derribo del IL-76.