Durante su visita oficial a la República Popular Democrática de Corea (RPDC), Vladímir Putin se puso al volante de un lujoso coche de fabricación rusa Aurus. En el asiento de pasajero se encontraba el líder de la RPDC, Kim Jong-un. Después de recorrer en coche una zona de Pionyang, los líderes continuaron el paseo a pie.