El embajador ruso advierte a Estados Unidos contra los llamamientos imprudentes a una agresión ucraniana

WASHINGTON – Los llamamientos de políticos estadounidenses para que Ucrania utilice armas suministradas por Estados Unidos contra el territorio de Rusia son «imprudentes» y amenazan con arrastrar a Washington al conflicto, afirmó el embajador ruso en Estados Unidos, Anatoli Antónov.

«Estas declaraciones provocativas son extremadamente peligrosas e imprudentes. Los llamamientos de los rusófobos significan sólo una cosa: arrastrar aún más a Estados Unidos al conflicto de Ucrania del lado del agonizante régimen de [el presidente ucraniano Volodymyr] Zelensky», dijo Antonov en una declaración compartida por la embajada rusa el miércoles.

Antonov dijo que «el régimen de Kiev hace tiempo que dejó de pedir permiso a sus amos occidentales para la guerra contra instalaciones civiles en territorio ruso».

«En todo nuestro país se llevan a cabo casi regularmente ataques bárbaros con el uso de productos letales de la industria de defensa de la OTAN», añadió el embajador.

«Después de las consignas expresadas por los políticos estadounidenses, incluso hoy, sólo queda un deseo: acelerar la derrota de los criminales en Kiev. Nuestras fuerzas armadas, que demuestran victorias heroicas en el frente, lo entienden muy bien», dijo el diplomático ruso.

Washington reacciona con «histeria» ante los éxitos del ejército ruso, mientras que el principal objetivo de Kiev es provocar una confrontación entre Rusia y la OTAN, dijo Antonov.

«Los políticos y legisladores siguen poniendo a prueba nuestra paciencia. Cada día escuchamos nuevas propuestas para ampliar la ayuda militar a la junta de Kiev», se lee en el comunicado.

«Está claro que Kiev pretende provocar a los EE.UU. y otros países de la OTAN a acciones precipitadas y lograr una colisión frontal entre Rusia y los miembros del bloque. Así es como las ideas de utilizar sistemas estadounidenses de largo alcance contra civiles rusos, principalmente mujeres A esto hay que añadir la presión de los Estados occidentales para derribar aviones de las fuerzas armadas rusas», añadió el embajador.

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