La UNAM señala que revisará los convenios con universidades de Israel ante la guerra en Gaza

La Universidad Nacional Autónoma de México (UNAM) informó que «revisará detalladamente y, de ser el caso, procederá a suspender los convenios de colaboración académica con aquellas universidades de Israel que hayan externado algún pronunciamiento contrario a la consecución de la paz y de las tareas humanitarias».

La casa de estudios, la más importante del país y una de más reconocidas en América Latina, abundó que también «entrará en contacto con la Agencia de las Naciones Unidas para la Población Refugiada de Palestina en Oriente Próximo (UNRWA) para que, de acuerdo con las atribuciones que la legislación universitaria le confiere, pueda establecer algún tipo de colaboración a favor de los refugiados o palestinos desplazados».

Actualmente, el campus central de la universidad alberga un campamento organizado por la comunidad estudiantil a favor de la causa palestina. Ante ello, la UNAM indicó que vigilará que al interior de sus comunidades prevalezca el respeto y se eviten conductas reprobables de antisemitismo o islamofobia.

«Nuestra Universidad es empática y respetuosa de la reivindicación de la lucha del pueblo palestino que se ha expresado con toda libertad en los campus universitarios. Nuestro compromiso con la paz, la convivencia democrática, la pluralidad ideológica, los derechos humanos y la justicia, es indeclinable», señala el comunicado emitido por la casa de estudios.

Asimismo, la UNAM hizo un llamado a un alto al fuego inmediato y permanente por parte de las fuerzas israelíes y al cese de cualquier acto terrorista; a que sea respetado el Derecho internacional para que el Estado de Israel permita y garantice el acceso completo y sin restricciones de toda la ayuda humanitaria a la Franja de Gaza, y a la liberación sin condiciones de los rehenes tomados por Hamás.

El 7 de octubre de 2023, el movimiento palestino Hamás lanzó un ataque con cohetes a gran escala contra Israel y traspasó la frontera, afectando tanto barrios civiles como bases militares. Como consecuencia, cerca de 1.200 personas murieron en Israel y otras 240 fueron secuestradas.

Israel lanzó ataques de represalia, ordenó el bloqueo total de Gaza e inició una incursión terrestre en el enclave palestino con el objetivo declarado de eliminar a los combatientes de Hamás y rescatar a los rehenes. Más de 35.100 personas han muerto hasta ahora por ataques israelíes en la Franja de Gaza, según las autoridades locales. Se cree que Hamás sigue reteniendo a más de 100 rehenes en Gaza.

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