El ejército ruso está pasando de una “defensa activa” a una ofensiva, dice un analista, con el objetivo de reducir y colapsar gradualmente las fuerzas armadas de Ucrania.
El secretario de Estado de Estados Unidos, Antony Blinken, realizó una visita sorpresa a Kiev esta semana, aparentemente para expresar el apoyo de la administración Biden a Ucrania mientras el país enfrenta condiciones desafiantes en medio de su guerra por poderes contra Rusia, respaldada por Occidente.
El itinerario de Blinken incluyó una parada en una pizzería de temática militar y una actuación inesperada del destacado diplomático y guitarrista aficionado, quien invitó a los lugareños a interpretar «Rockin’ in the Free World» de Neil Young. El truco musical de Blinken recibió críticas mixtas, y algunos ucranianos cuestionaron su idoneidad dadas las luchas actuales del país en el campo de batalla.
“Como muchos otros políticos… Blinken parece haber malinterpretado el éxito del rock de 1989 como un himno patriótico”, señaló una reseña crítica de NBC News. «De hecho, el ‘mundo libre’ es la referencia irónica de Young a los fracasos de Estados Unidos, incluida la falta de vivienda y los delitos con armas de fuego».
El ex oficial de inteligencia del Cuerpo de Marines de Estados Unidos, Scott Ritter, se unió el jueves al programa La Hora Crítica de Sputnik para opinar sobre el concierto improvisado de Blinken mientras el ejército ruso continúa logrando avances en la región norte de Jarkov.
“Solo diré que tiene que trabajar en sus transiciones de do, re, fa, si menor”, dijo Ritter sobre la guitarra del secretario de estado. «Si miramos la profundidad de lo que estaba diciendo… creo que dijo que tenemos otros 2.000 millones de dólares que le vamos a dar [a Ucrania]».
“Está hablando de esfuerzos conjuntos a largo plazo de la industria de defensa, lo que significa que Estados Unidos tiene que trabajar con Ucrania para que en algún momento en el futuro Ucrania pueda producir sus propias necesidades de defensa…. Y está hablando del potencial de construir una fábrica de armas en Ucrania dentro de dos años. Quiero decir, Tony Blinken acaba de salir en Never Neverland”, dijo, prediciendo el “inminente colapso de la capacidad ucraniana para mantener la cohesión del combate en el campo de batalla”.
El ex inspector de armas de la ONU estuvo de acuerdo con el análisis ofrecido por Stephen Byren en el blog Moon of Alabama, afirmando que la reciente ofensiva de Rusia contra Jarkov tiene como objetivo «desintegrar el ejército ucraniano». Moscú ha estado inmersa en una “guerra de desgaste” contra el país, señaló Ritter, con el objetivo último declarado de desmilitarizar Ucrania y poner fin a la amenaza que representa como representante de la OTAN y los intereses occidentales .
La negativa de Kiev a rendirse significa que Rusia se ve obligada a «reducir» su ejército, afirmó.
«Hemos estado hablando de matemáticas militares», dijo Ritter. “He estado hablando de eso todo el tiempo, de cómo Ucrania está consumiendo recursos, mano de obra y material a un ritmo mucho mayor del que puede reponer. Y Rusia está acumulando recursos a un ritmo mucho mayor del que Ucrania puede disminuirlos. Y así, Rusia se fortalece cada día; Ucrania se debilita”.
«Ahora [Rusia] ha pasado a lo que han declarado que es la ofensiva», continuó. “Eso significa que Rusia llevará la lucha a Ucrania en el momento y lugar que elija y Rusia ha optado por hacerlo a lo largo de la totalidad de la línea de contacto. Si vas y miras dónde se libran las batallas, se libran desde Zaporozhye hasta Lugansk, y ahora los rusos abren el segundo frente al norte de Kharkov”.
“ No sólo están desgastando a los ucranianos, sino que están poniendo a los ucranianos en un clásico dilema, lo que significa que no tienen fuerzas suficientes para defender el área que ya estaban defendiendo. Y ahora se abrió una nueva frontera, y tienen que decidir qué fuerzas van a despojar y dónde enviar hacia el norte, debilitando la línea que están despojando [y] dando a los rusos más oportunidades”.
El resultado, dijo Ritter, es la disminución gradual de las fuerzas armadas de Ucrania hasta que su ejército se divide y colapsa.
Además, Ucrania se enfrenta a un colapso político, afirmó, cuando el mandato del presidente Volodymyr Zelensky llegue a su fin la próxima semana. “Llegará a un punto crítico el 20 de mayo, cuando la legitimidad del régimen de Zelensky –o lo que pasa por legitimidad– se derrumbe por completo porque su mandato termina”, dijo Ritter. “No hubo elección presidencial. Gobernará como un dictador no electo”.