A pesar de no ser una estrella, este jugador ha cautivado los corazones de los aficionados de los Minnesota Timberwolves de la NBA.
Al menos 156 fanáticos del equipo de baloncesto Minnesota Timberwolves de la NBA, durante la semana pasada, se tatuaron el nombre del pívot suplente Naz Reid, a pesar de que este no «es el mejor jugador del equipo», informa The Wall Street Journal.
La tendencia empezó con una «chispa de inspiración» del tatuador aprendiz JC Stroebel, quien tuiteó que iba a tatuar ‘Naz Reid’ por 20 dólares a cualquier persona, después de quedar impresionado con sus habilidades, cuando contribuyó en la cancha para que su equipo se sobrepusiera, aunque fuera por un tiempo, ante el actual campeón, los Denver Nuggets, durante el partido del pasado 12 de mayo.
La publicación se volvió viral y Stroebel, junto a su compañero aprendiz Jesse George, recibieron tantas solicitudes que durante el pasado fin de semana tuvieron que tatuar hasta 50 ‘Naz Reid’ por día en su estudio Beloved Studios de Roseville, Minnesota.
¿Por qué se volvió popular?
Cuando se levanta del banquillo de los Timberwolves, recibe más aplausos que los titulares, afirma el diario. Hasta el gobernador de Minnesota, Tim Walz, tuiteó su nombre después de una reciente victoria del equipo.
La magnitud del reciente fenómeno de los tatuajes solo incrementó la simpatía general que sienten los aficionados de los Timberwolves hacia Naz Reid. Su historia les sirve de inspiración a los «sufridos fanáticos», quienes este año han vivido «un raro momento de éxito» con el equipo, que sigue compitiendo en la temporada, tras meterse en las semifinales de la Conferencia Oeste.
Como consecuencia, el obsequio del equipo más vendido esta temporada resultó ser una toalla de playa con el nombre de Naz Reid, y su nombre se ha convertido en una especie de ‘lengua en clave’ para los fanáticos, quienes se identifican al pronunciar su nombre y responder con el mismo.
Los residentes de Minnesota quedaron cautivados por la historia de superación de Reid, quien en el 2019 ni siquiera fue seleccionado en el ‘draft’ de la NBA, pero esta temporada fue elegido como el Mejor Sexto Hombre del año, un premio para el mejor suplente de todo el campeonato.