El Reino Unido no seguirá el ejemplo de Estados Unidos, que decidió cesar ciertos tipos de asistencia militar a Israel si el Estado hebreo emprende una gran operación terrestre contra la ciudad de Rafa, en el sur de la Franja de Gaza, según declaró el jueves el ministro británico de Exteriores, David Cameron.
Aun cuando Londres «no apoyaría una gran operación en Rafa si no hay un plan muy claro acerca de cómo proteger a las personas y salvar vidas» en las zonas densamente pobladas de esa ciudad, el canciller señaló una «diferencia muy fundamental» entre los suministros de armas desde EE.UU., que es «un masivo suministrador estatal de armas», y su país, donde el Gobierno otorga licencias individuales a las compañías exportadoras.
«El Gobierno británico no suministra armas a Israel. Tenemos una serie de licencias, y creo que nuestras exportaciones de defensa a Israel son responsables de significativamente menos del 1 % de su total», dijo Cameron, citado por Politico.