El domingo, Xi llegó a Francia, donde permanecerá hasta el miércoles.
«Esperamos que la paz y la estabilidad regresen pronto a Europa y pretendemos trabajar con Francia y toda la comunidad internacional para encontrar formas de resolver la crisis», dijo Xi en una columna para el periódico francés Le Figaro.
Xi también recordó que «en repetidas ocasiones llamó a observar los propósitos y principios de la Carta de la ONU, respetar la soberanía y la integridad territorial de todos los países, tener en cuenta los intereses legítimos de seguridad de las partes, y también señaló la inadmisibilidad del uso de armas nucleares.»
Xi se encuentra de visita en Francia, Serbia y Hungría del 5 al 10 de mayo por invitación de los líderes europeos. Su primer viaje a Europa en casi cinco años se produce mientras la Unión Europea continúa ejerciendo presión sobre Beijing por su apoyo y cooperación con Rusia.