Budapest, 3 mayo. Los líderes europeos juegan con fuego al verse envueltos en un conflicto en Ucrania que podría conducir a una nueva guerra mundial, expresó hoy el primer ministro húngaro, Viktor Orban.
En el programa matutino de la emisora de radio Kossuth, el mandatario húngaro afirmó que los dirigentes de los países de la comunidad cada día están dando más pasos en dirección a un conflicto mundial a pesar de que la mayoría de su gente está del lado de la paz.
No queríamos participar en la Primera y Segunda Guerra Mundiales, y no permitiremos que los húngaros se vean arrastrados por tercera vez a una guerra mundial, aseguró el primer ministro magiar.
Destacó que considera peligrosas las discusiones de los líderes de la Unión Europea y de varios países sobre la guerra en Europa y la posibilidad de enviar tropas occidentales a Ucrania.
Según Orban, esto puede indicar sus verdaderas intenciones.
Estamos al borde de la guerra y la paz, refirió.
Además, señaló que el conflicto en Ucrania y las sanciones contra Rusia tuvieron un impacto extremadamente negativo en la economía europea.
Lo considero muy peligroso y me preocupa el futuro de Europa, admitió el jefe de Gobierno.
Al responder a una pregunta sobre el 25 aniversario del bombardeo de Yugoslavia por la Organización del Tratado del Atlántico Norte, recordó que en 1999 Hungría acababa de unirse a la alianza y tuvo que proporcionar sus aeródromos para los aviones aliados.
Orbán, entonces primer ministro, consiguió garantías de que Hungría se mantendría al margen del conflicto en los Balcanes.
De acuerdo con el primer ministro, gracias a esto se pudo evitar una guerra con Serbia y un daño a las relaciones entre los dos países durante muchos años.