Mientras tanto, Pekín le indicó al secretario de Estado de EE.UU., Antony Blinken, qué se debe corregir en las relaciones bilaterales para que no se precipiten en una «espiral descendente».
El ministro de Defensa de Rusia, Serguéi Shoigú, se ha reunido este viernes con su par chino, Dong Jun, en la ciudad de Astaná, capital de Kazajistán, para abordar los aspectos clave de la asociación de ambos países en materia militar.
El titular chino destacó que la cooperación de las Fuerzas Armadas de China y de Rusia desempeña un papel estabilizador en el mundo.
«La cooperación militar ruso-china es un elemento clave para aumentar la capacidad defensiva y mantener la estabilidad global y regional», afirmó Shoigú. Mencionó, a continuación, los «ejercicios operativos y de combate conjuntos en tierra, mar y aire» y las exitosas «misiones de entrenamiento militar de diversos grados de complejidad».
Shoigú admitió que «la situación político-militar en el mundo no se hace más tranquila», y también que «surgen nuevos y se agudizan los viejos focos de tensión» en un proceso que atribuyó a las «aventuras geopolíticas y la actuación neocolonial egoísta de Occidente».
Al mismo tiempo, la «asociación omnímoda y la interacción estratégica» ruso-china se desarrollan «en contraste con la situación general alarmante». Se mantiene una alta dinámica de este desarrollo y se amplían las relaciones amistosas entre Moscú y Pekín.
Dong Jun alabó, asimismo, el papel estabilizador de las Fuerzas Armadas de China y Rusia en los procesos mundiales, su aportación en el mantenimiento de la estabilidad estratégica.
«En condiciones de la situación internacional cambiante es especialmente importante que las relaciones entre nuestras Fuerzas Armadas guarden su alta dinámica conforme a las tendencias de la época», dijo el titular de Defensa chino. Agregó también que la cooperación bilateral tiene «mucha importancia para la estabilidad estratégica en el planeta».
Contexto chino-estadounidense
Ha sido el primer encuentro presencial entre Shoigú y Dong desde que este último fue designado a la cartera ministerial a finales del año 2023. Hace diez días, el jefe del Pentágono, Lloyd Austin, habló por videoconferencia con Dong y le aseguró que «Estados Unidos seguirá volando, navegando y operando con cuidado y responsabilidad dondequiera que las leyes internacionales permitan», incluidas las aguas del mar de la China Meridional.
Mientras tanto, el presidente chino, Xi Jinping, recibió este viernes al secretario de Estado estadounidense, Antony Blinken, en Pekín y le pidió mirar el desarrollo de China «desde una perspectiva positiva» para que las relaciones bilaterales mejoren. Este cambio, dijo, sería fundamental de lo que «debe corregirse» para que se estabilicen las relaciones entre ambos países.
El ministro de Asuntos Exteriores chino, Wang Yi, ahondó en el tema del diálogo bilateral durante las negociaciones con Blinken y le advirtió del riesgo de una «espiral descendente» a medida que «los factores negativos en la relación siguen aumentando y consolidándose».
«Los legítimos derechos de desarrollo de China han sido suprimidos injustificadamente y nuestros intereses fundamentales enfrentan desafíos», dijo el canciller, pidiendo el «respeto a los intereses fundamentales de cada uno».