Durante la cumbre del ALBA-TCP, que se desarrolla en Venezuela, el presidente de Bolivia rechazó las políticas injerencistas e intervencionistas de la Casa Blanca.
El presidente de Bolivia, Luis Arce, alertó este miércoles que «la amenaza global aumentó» luego de que EE.UU. aprobara un paquete de ayuda financiera de 95.000 millones de dólares para Ucrania, Taiwán e Israel.
El mandatario boliviano participó en la Cumbre de la Alianza Bolivariana para los Pueblos de Nuestra América — Tratado de Comercio de los Pueblos (ALBA-TCP), que acoge Venezuela.
«Hace pocos días, la amenaza a la paz mundial ha aumentado. EE.UU. aprobó 95.000 millones de dólares para apoyar a Ucrania, Israel y Taiwán. Esa es una clara señal de que se seguirá buscando la desestabilización de Europa del Este, de Oriente Medio y de Asia, con la violencia como principal herramienta«, dijo el jefe de Estado.
«Antes que transitar por el camino del diálogo, la diplomacia y la política, se opta por el camino de la guerra y el armamentismo«, manifestó el presidente boliviano.
«Ojalá», dijo, esa cantidad de dinero y otros tantos miles de millones que se han invertido con el mismo propósito bélico fueran destinados a «combatir el hambre, la extrema pobreza y las desigualdades».
En su intervención, Arce exigió respeto al principio de igualdad de derechos y a la libre determinación de los pueblos, consagrados en las Naciones Unidas; así como el cese de las políticas injerencistas e intervencionistas de la Casa Blanca y la Unión Europea hacia América Latina y el Caribe.
Además, pidió el cese de la imposición de bloqueos, embargos y medidas coercitivas unilaterales contra los pueblos de la región, y promovió la incorporación de Palestina como miembro pleno del ALBA-TCP.