Los líderes europeos durante el reciente Consejo Europeo «tuvieron cuidado de hacer la más mínima promesa» con respecto a la entrega de este tipo de armas a Ucrania, informó Le Monde.
La Unión Europea (UE) «no puede fortalecer la defensa antiaérea de Kiev», porque «varios países» del bloque comunitario «se muestran reacios a desprenderse de sus sistemas de defensa más avanzados», reza un reciente artículo del diario francés Le Monde.
A pesar de las continuas peticiones del Gobierno de Ucrania de que Occidente le entregue más sistemas de defensa aérea, recientemente calificadas por el presidente, Vlolodímir Zelenski, de «prioridad» en su conflicto con Moscú, los líderes de la UE durante el Consejo Europeo de la semana pasada «tuvieron cuidado de hacer la más mínima promesa«, indica el medio.
De estos destacó solo el primer ministro saliente de los Países Bajos, Mark Rutte. «Sabemos que varios países tienen reservas de Patriot, pero tal vez no quieran entregarlos directamente«, dijo, al mostrarse dispuesto a comprar a las naciones europeas en cuestión estos sistemas de defensa aérea, de fabricación estadounidense, para entregarlos luego a Ucrania.
Al mismo tiempo, un diplomático alemán, bajo la condición de anonimato, dijo al medio galo que los Países Bajos están entre las cuatro naciones europeas que poseen los sistemas Patriot, pero «se niegan a desprenderse de ellos» y entregarlos a Kiev. Otras tres son el Reino Unido, España y Polonia, indicó esta fuente. De este modo, actualmente, de la UE, solo Alemania entregó a Ucrania dos de sus 12 sistemas Patriot, y aseguró que entregará uno más.
Por su parte, Francia tampoco se apresura por entregar a Ucrania más unidades de su sistema antiaéreo SAMP/T, conocido como Mamba, a pesar de que el canciller ucraniano, Dmitri Kuleba, durante una reunión de los cancilleres del G7 a finales de la semana pasada en Capri (Italia), pidiera a su homólogo francés, Stéphane Séjourné, que le entregara otra unidad de este sistema de defensa aérea franco-italiano. De acuerdo con una fuente francesa, París y Roma están actualmente «trabajando en ello», no obstante «no se puede esperar una respuesta tan rápida», teniendo en cuenta grandes dificultades que tuvieron para suministrar a Kiev la primera unidad de SAMP/T.