El candidato a senador augura los desafíos en ciernes para un eventual gobierno de Claudia Sheinbaum, favorita en las encuestas.
Gerardo Fernández Noroña, integrante del equipo de campaña de la candidata presidencial del oficialismo, Claudia Sheinbaum, afirma que, independientemente de quien despache en la Casa Blanca, la relación entre México y EE.UU. no será fácil de gestionar.
Ante el posible ‘revival’ de Donald Trump en los comicios estadounidenses, Fernández Noroña revela que es un escenario que ya se había contemplado dentro del equipo de campaña de la exjefa de Gobierno de la Ciudad de México.
Frente a esta posibilidad, Fernández Noroña asegura que, de ganar la elección del próximo 2 de junio, un Gobierno encabezado por Sheinbaum hará valer, igual que lo hizo el presidente Andrés Manuel López Obrador, el respeto inexcusable a la independencia y soberanía de México.
RT: ¿Cuál es tu balance sobre el desempeño de Claudia Sheinbaum durante la campaña presidencial? ¿Qué rol ha jugado la oposición?
G.F.N.: Claudia no ha bajado el ritmo, está haciendo por lo menos tres eventos masivos por día, así como reuniones diversas y trabajos de evaluación. Por otro lado, tenemos la iniciativa ‘Diálogos por la Transformación’, todo va muy bien.
Todas las encuestas, hasta las que paga el frente ‘guango’ de derecha, le dan una ventaja muy importante a nuestra compañera Claudia Sheinbaum que, yo diría, es imposible de remontar a estas alturas.
A pesar de esto, no hay exceso de confianza dentro del equipo de campaña, se sigue trabajando para fortalecer aún más el resultado a nuestro favor.
La derecha está apostando a descalificar la elección de forma anticipada porque sabe que va a perder. Hasta el momento son tres sus flancos de ataque.
El primero es el tema de la inseguridad y la violencia. Ellos plantean que ha resultado un fracaso la política de seguridad de nuestro Gobierno.
Utilizan las agresiones en contra de candidatos para salir a decir que no existen condiciones para llevar a cabo la elección.
En segundo lugar, afirman que los grupos del narcotráfico están de nuestro lado cuando, en realidad, son ellos los que han mantenido vínculos con el crimen organizado, me refiero a los partidos Revolucionario Institucional (PRI) y Acción Nacional (PAN).
Durante semanas se dedicaron a promover las campañas de #NarcoPresidente y #NarcoCandidata, acusaciones infames auspiciadas desde el exterior. Para mí se trata de una conjura internacional de las derechas, respaldada con inversiones de millones de dólares. Y, el último flanco de ataque, son los señalamientos de que asistimos a una «elección de Estado», otra patraña.
Hay que recordar que fuimos nosotros quienes combatimos al régimen de partido de Estado, construido por el PRI, una organización política que hoy forma parte de la coalición opositora. Es también una infamia que se afirme que estamos utilizando los programas sociales con fines electorales.
Es importante hacer notar que se adelantaron las transferencias, ya que durante estos meses de campaña electoral no serán distribuidos los apoyos.
Lo que la oposición quiere es que se anule la elección, sin embargo, no veo condiciones para que ocurra.
Habrá una participación avasalladora del pueblo y el reto nuestro es ganar no solo la Presidencia, sino conseguir las dos terceras partes del Congreso (para poder aprobar reformas a la Constitución), que esto sí lo veo muy complicado.
RT: A propósito de campañas de desprestigio, es llamativo que la publicación de reportajes en medios de comunicación estadounidenses, en donde se señala a personas del equipo de López Obrador de mantener vínculos con el crimen organizado en las campañas de 2006 y 2018, sin documentos probatorios, tuvo lugar justo en un año electoral…
G.F.N.: En efecto, cuando hablo de una ‘conjura internacional de las derechas’, a eso me refiero, aunque también es cierto es que el Gobierno de EE.UU. siempre se ha entrometido en los asuntos internos de los países latinoamericanos. El caso de México no es la excepción.
Claro, con Gobiernos como los encabezados por Enrique Peña Nieto o Felipe Calderón Hinojosa, desde EE.UU. no decían nada, con todo y que alguien como Genaro García Luna, responsable de la seguridad en México, mantuviera vínculos con grupos del crimen organizado, actualmente preso en Nueva York.
Cuando fui diputado federal, de 2009 a 2012, le dije a García Luna en su cara que él trabajaba con Joaquín ‘El Chapo’ Guzmán y era un criminal. Con todo, el Gobierno de EE.UU. no solamente no decía nada, sino que incluso lo trataba como si fuera una persona distinguida.
Ahora, en cambio, durante este Gobierno, se ha impulsado una campaña de desprestigio que comenzó con la publicación de un artículo de quien ganó dos veces el Premio Pulitzer, Tim Golden, sin presentar prueba alguna de sus aseveraciones.
A pesar de la ofensiva mediática, el presidente López Obrador ha logrado mantenerse con más de un 70 % de popularidad. Se equivocaron al intentar socavar una de las fortalezas inexpugnables del presidente, su honestidad.
A pesar de esta ofensiva, el presidente López Obrador ha logrado mantenerse con más de un 70 % de popularidad. Se equivocaron al intentar socavar una de las fortalezas inexpugnables del presidente, su honestidad.
Y, luego, esos ataques intentan extenderlos a Claudia Sheinbaum, y es un verdadero despropósito: ella es una mujer impecable. Pero sí, es cierto, hay una gran ofensiva, no solo dirigida desde EE.UU., sino también desde Europa.
Ahí están los señalamientos del Rey de España o las descalificaciones, durante la más reciente visita de la diputada Cayetana Álvarez de Toledo.
Pero no les ha funcionado esta campaña, con todo y sus 300 millones de mensajes en las redes sociales.
RT: ¿Cuáles serían las prioridades de Claudia Sheinbaum en caso de llegar al Palacio Nacional? ¿En que se pondría el acento en este ‘segundo piso’ de la 4T?
G.F.N.: La transformación se amplía y se profundiza. Hay temas que no se pudieron abordar en este primer Gobierno encabezado por el compañero presidente López Obrador.
Claudia Sheinbaum ha tomado muy en serio los apoyos al campo y los pescadores, lo mismo la consolidación de todo el sistema de salud, que ha sido un gran reto porque se atravesó la pandemia de covid-19.
En el tema de la educación también hay pendientes. No hemos logrado que ningún joven sea rechazado de las universidades públicas, en este caso Claudia trae el proyecto de construir escuelas del nivel medio superior y universidades tanto como sea necesario.
Se continuará con la política de construcción de obra pública, las políticas de ‘austeridad republicana’, así como mantener la estabilidad de la economía que, dicho sea de paso, ha resultado una gran sorpresa para la derecha.
En este momento el peso mexicano se ha venido fortaleciendo frente al dólar. Es indudable que a los empresarios les ha ido muy bien durante este Gobierno, no tienen nada que reclamar.
Sin embargo, hay un sector del empresariado que mantiene su repudiohacia nuestro movimiento. El combate a la corrupción seguirá sin tregua, lo mismo la lucha contra el crimen organizado.
Le critican a Claudia que representa la continuidad cuando no podría ser de otra manera: al final de cuentas ella abandera el proyecto del que formamos parte.
Con todo, hay elementos muy importantes en su agenda que serán una verdadera contribución para esta segunda etapa de la Cuarta Transformación.
RT: Según la mayoría de encuestas, Donald Trump podría tener chances de ganar la elección presidencial en noviembre próximo. ¿Se ha contemplado este escenario dentro del equipo de campaña? ¿Hay preocupación al respecto?
G.F.N.: Sí, claro que se ha tomado en cuenta. Es algo que ya veíamos venir desde hace muchos meses.
No era todavía candidato virtual de los republicanos, y ya dentro del equipo de Claudia Sheinbaum se comentaba que Trump iba a ser seguramente el próximo presidente de EE.UU. y que la relación sería muy difícil.
Bueno, la propia personalidad de Donald Trump es muy difícil, recordemos que humilló a muchos jefes de Estado durante su mandato.
Pero tampoco hay que olvidar que frente al compañero presidente López Obrador se portó de manera impecable.
El compañero presidente tuvo un manejo excepcional y brillante de la relación con el Gobierno estadounidense, y particularmente con Donald Trump. Y creo que vamos a seguir en esta misma línea.
En una entrevista reciente para el programa ’60 minutos’ de CBS, el compañero presidente dejó claro que no somos un protectorado, no somos una colonia, somos un país independiente, soberano y, como tal, nos vamos a comportar.
El compañero presidente tuvo un manejo excepcional y brillante de la relación con el Gobierno estadounidense, y particularmente con Donald Trump. Y creo que vamos a seguir en esta misma línea.
¿Eso implica que vamos confrontarnos con el Gobierno de EE.UU.? Por supuesto que no. Tenemos una relación comercial muy fuerte, una frontera muy grande, retos comunes y, en este sentido, habrá que mantener una buena relación, con todo y las dificultades que conlleva tener a Donald Trump en la Presidencia.
Lo que es un hecho es que el Gobierno EE.UU. debe modificar su política migratoria, no puede seguir desconociendo los derechos de millones de seres humanos, no solo mexicanos, que a diario contribuyen con la generación de riqueza y, sin embargo, se les trata como si fueran unos delincuentes.
RT: Con alguien como el gobernador de Texas, Greg Abbott, quien busca ser candidato a vicepresidente en la fórmula de Trump y el endurecimiento de políticas en contra de los migrantes ¿No es previsible un ‘choque de trenes’ con EE.UU. si Sheinbaum gana la elección presidencial?
G.F.N.: Bueno, eso mismo se pensaba cuando López Obrador llegó a la Presidencia y, sin embargo, ese choque no se dio nunca.
La relación con Donald Trump no estuvo exenta de presiones, es cierto, hay que recordar su amenaza de imponer aranceles, que llevó a que el presidente convocara una manifestación muy importante en la ciudad de Tijuana (Baja California).
O la amenaza persistente (de legisladores del Partido Republicano) de catalogarnos como ‘narcoterroristas’ para intervenir en nuestro país, como si ellos tuvieran facultades para hacerlo más allá de su frontera, se pudo resolver de manera correcta.
La relación con EE.UU. para nosotros implica retos. Lo cierto es que la relación, bien sea demócrata o republicano el presidente, siempre es muy difícil.
Ha sido raro el presidente de EE.UU. que mantiene una relación de respeto y solidaridad con nosotros, por lo regular siempre es un vecino muy complicado, y lo seguirá siendo.
La relación con EE.UU. será una de nuestras prioridades en materia de política exterior, no enfrentaremos nada nuevo.
Lo haremos con éxito, Claudia Sheinbaum llegará a la Presidencia de México con una legitimidad muy grande, ganará la elección con un respaldo avasallador del pueblo.
Es una mujer lo suficientemente talentosa y creo que designará a una persona con la capacidad de desarrollar de forma eficiente el trabajo al frente de la Cancillería. Vamos a poder sortear las dificultades.