Se reportó el hallazgo de Gaia BH3, un agujero negro estelar ubicado a 1.926 años luz de distancia de la Tierra, en la constelación de Aquila.
Un grupo internacional de astrónomos descubrió un agujero negro estelar, el más masivo de su tipo identificado hasta el momento en la Vía Láctea, informó este martes la Agencia Espacial Europea (ESA).
Los agujeros negros de masa estelar se originan como resultado del colapso de una estrella con una masa de nacimiento de entre 8 y 10 veces la del Sol. El colapso de estos cuerpos celestes es ocasionado por el agotamiento de todo su combustible (hidrógeno). Estos agujeros negros son también denominados «inactivos», ya que, al no tener un objeto cercano para extraerle materia, no pueden generar luz. Esta condición dificulta que puedan ser detectados por los equipos de observación convencionales.
El agujero negro estelar más masivo
En un estudio, recientemente publicado en la revista Astronomy & Astrophysics, se reportó el hallazgo de Gaia BH3, un agujero negro estelar ubicado a 1.926 años luz de distancia de la Tierra, en la constelación de Aquila. Esto convierte a Gaia BH3 en el segundo agujero negro más cercano a nuestro planeta del que se tiene registro. El primero es Gaia BH1, un agujero negro estelar con una masa 10 veces la del Sol y que se encuentra a una distancia de 1.560 años luz.
Los científicos explicaron que el agujero negro estelar descubierto recientemente tiene una masa que es 33 veces la del Sol. Hasta antes de su identificación, el agujero negro más masivo de esta clase encontrado en nuestra galaxia era Cygnus X-1, con una masa 20 veces mayor que la de nuestra estrella. De acuerdo con la ESA, la masa promedio de los agujeros negros estelares conocidos en la Vía Láctea es 10 veces mayor que la del Sol.
Por otro lado, los astrónomos explicaron que Gaia BH3 es el tercer agujero negro inactivo descubierto a partir de los datos obtenidos del telescopio espacial Gaia, cuya misión es crear el mapa tridimensional más completo de nuestra galaxia. La posición del objeto astronómico fue confirmada por el telescopio terrestre VTL, en el desierto de Atacama (Chile).
La presencia de un extraño compañero
No obstante, los especialistas recalcaron que el agujero negro pudo ser identificado por el extraño movimiento de la estrella que lo orbita. Se sugirió que este cuerpo estelar es poco común, puesto que se trata de una antigua estrella gigante que se formó en los primeros 2.000 millones de años después del Big Bang.
A su vez, se dio a conocer que la compañera estelar de Gaia BH3 tiene pocos elementos más pesados que el hidrógeno y el helio, lo que indica que la estrella masiva que originó al agujero negro también pudo haber sido pobre en elementos pesados. Según los investigadores, esta evidencia respalda por primera vez la teoría de que los agujeros negros de gran masa, que son detectados mediante observaciones de ondas gravitacionales, fueron producidos por el colapso de estrellas masivas primitivas con una cantidad menor de elementos pesados.
También se explicó que la composición de la estrella que orbita Gaia BH3 brinda información sobre los mecanismos que llevaron a la formación de estos dos objetos astronómicos. «No hay evidencia de que esta estrella haya sido contaminada por el material arrojado por la explosión de supernova de la estrella masiva que se convirtió en BH3», sostuvo la científica Elisabetta Caffau, quien enfatizó que esto podría sugerir que el agujero negro adquirió este cuerpo estelar después de su creación, capturándolo de otro sistema.