MOSCÚ — Colombia expresó su preocupación por una nueva espiral de violencia en Oriente Medio y urgió a las partes a cesar las hostilidades y reducir la tensión.
«Las acciones violentas, como las sucedidas en las últimas semanas en esta región, que han tenido como protagonistas a Israel y a la República Islámica de Irán; ponen en peligro la paz y la seguridad internacional», dice un comunicado de prensa publicado por la Cancillería colombiana.
«Colombia se suma a las voces de la comunidad internacional que claman por la resolución de los conflictos por la vía de la negociación política, diplomática y medios pacíficos.
Hacemos un llamado al desescalamiento y cese inmediato de hostilidades», declara.
Bogotá pidió a todos los actores involucrados «ejercer un máximo de contención» y acatar las resoluciones de la Asamblea General y el Consejo de Seguridad de las Naciones Unidas.
Asimismo, exhortó a la comunidad internacional a «emprender acciones hacia la paz, incluida la convocatoria de una conferencia internacional de paz en la región», buscando «compromisos reales para excluir a la población civil de las acciones militares y la pronta liberación de los rehenes».
El 13 de abril, Irán lanzó un ataque masivo con drones y misiles contra Israel en represalia por el bombardeo sobre el consulado iraní en Damasco. El ataque, que se prolongó por varias horas, fue el primero que se llevó a cabo directamente desde Irán, aunque también contó con la participación de fuerzas proiraníes en Siria, Irak y Yemen.
Según las Fuerzas de Defensa de Israel, se lanzaron unos 300 proyectiles, 170 drones y 30 misiles de crucero; prácticamente todos fueron derribados fuera del territorio israelí.
Uno de los misiles provocó «daños menores» en la base aérea israelí de Nevatim, en el sur del país. Otro misil balístico iraní dañó una carretera en el área del monte Hermón, en el norte. La única víctima del ataque iraní en Israel fue una niña beduina de 7 años que sufrió heridas graves por la caída de metralla en el desierto de Negev, no lejos de la base de Nevatim.
Numerosos países condenaron el ataque de Irán a Israel e instaron a las partes a actuar con moderación para evitar una escalada en Oriente Medio. Teherán sostiene que fue un acto de legítima defensa tras el bombardeo del pasado 1 de abril sobre su oficina consular en Damasco, en el que murieron varios mandos militares y del que responsabiliza a Israel.
El 14 de abril, Irán dio por concluida su operación de represalia, pero advirtió al mismo tiempo de que, si Israel intenta una acción en suelo iraní o contra instalaciones iraníes en Siria u otro país, la respuesta siguiente será aún mayor.